Capítulo "2"

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Joan

— Espera, ¿Entonces todo fue una mentira? — pregunta la pelinegra.

— No, todo lo que vi si paso y va a pasar si no hacemos algo — le repito a Renata.

— ¿Y cómo diablos evitaremos el fin del mundo? — cuestiona Tara con cara de evidente confusión.

— Ese lenguaje Tara — reprimo con sutileza a la pelinegra de cabello corto.

— Perdón.

— ¿Y por qué no solo matamos al depurador que causa el fin y ya? — cuestiona Lexi mientras se agarra el mentón.

— Son brujas, se supone que deberían ser inteligentes — les burla Vladímir, quién se encuentra en una esquina, recargado con los brazos cruzados.

— Así no funciona esto niñas — me recargo mejor en la silla y acomodo mi vestido negro que al ser flojo me permite mayor movimiento y comodidad — Somos brujas y los depuradores son muy superiores a nosotras.

— Sería imposible que alguien con nuestro rango matará a un depurador — añade el moreno.

— ¿Cuánto tiempo tenemos? — inquiere Tara con seriedad.

— Puede que algunas de mis actitudes hayan influido en el comportamiento de mi huésped, por eso razón la naturaleza sabe que viaje en el tiempo y por consecuente puede retrasar o adelantar los sucesos — pongo mis manos en mi regazo entrelazando mis dedos — Así que no sabemos. Podría ser mañana o dentro de cinco años, por eso debemos darnos prisa.

— ¿Por dónde quieres iniciar? — Vladímir mi toma del hombro y lo empieza a sobar — La única forma de evitarlo es quitándole la manera de hacerlo.

— Quitándole la magia — comenta Renata como si por fin lo entendiera.

— Quitarle la magia será fácil, ¿Cierto? — habla Lexi tratando de convencerse a ella misma de eso, pero sé perfectamente que ella no cree que sea sencillo.

— Sabes que no — me pongo de pie para darle una vuelta a la mesa y situarme a lado de Lexi — Esto será muy peligroso, si quieres irte lo puedes hacer ahora, ten la certeza de que yo siempre te voy a cuidar. Lo último que quiero es que pienses que tienes que hacer esto por obligación.

Mi niña vacila un poco, pero no tarda mucho tiempo cuando me toma de la mano y la besa.

— Tú eres mi Kanssyl, si dices que esto es nuestro deber lo acepto y asumo todas sus consecuencias.

— Gracias mi niña — le digo mientras acarició su mano — Tenemos que buscar a alguien que sea lo suficientemente fuerte como para soportar la magia del depurador y los portadores.

— ¿Quiénes están por encima de ellos? — pregunta Tara.

— El anticristo, pero claro que no podemos darle el poder de destruirnos a un ser que por naturaleza es maligno — le responde Vladímir.

— ¿Entonces? — Renata está perdiendo la paciencia, lo puedo notar por ese manía que tiene de morderse las uñas.

Claro que sé la respuesta a esa pregunta y claro que sé lo difícil que será.

Magia Letal (Segundo Libro ✔️) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora