Parecía dificil de entender, mi padre me dice que estudie y mi nana dice que haga caso, a veces me siento aficiado.
Luego de que terminara las clases salí del lugar, en mis manos sostenían algunos papeles enrollado que me había dejado mi tutor.
Caminé por los pasillos hacia mi recamara pero en eso vi el jardín me detuve y luego mi mente me recordó algo que había mencionado mi padre.
"Cuando un viejo sol deciende, el nuevo sol se alza para remplazarlo y gobernar con orgullo"
"No obstante cuando ese día llegué hijo mío tú luna se presentará ante ti como un símbolo de fortaleza, ella brillará para ti en tus noches más oscuras iluminando tu camino hacia la gloria"
"Cómo sabré si es mi Luna"
"Lo sabrás cuando la veas"
En eso un guardia colocó su mano sobre su hombro y Saúl lo miró este le indico su camino hacia su habitación.
El guardia acompaño al pequeño sol hacia su habitación se despidió y se retiró, Saúl entro atravesó la puerta y la cerró.
Entre los documentos que llevaba en sus manos los deposito sobre el pequeño escritorio y sentó en la silla pensativo.
"Si, encuentro a mi Luna no me sentiré solo"
Sonrió levemente mientras desenrolla los papeles en su escritorio, y se concentro en ellos.
"Solo espera mi Luna, seré alguien de quién te sientas orgullosa, nunca te sentirás sola porque yo estaré contigo" dijo Saúl con una sonrisa feliz en su corazón.