El sonido de aquella ambulancia se oía a kilómetros, su sonido era muy insistente; que los vehículos le daban el paso inmediatamente.
Al llegar a la clínica eso alertó a todos los enfermeros, que se encontraban en la entrada tomando un poco de aire. Se asomaron, y vieron a un León que era un mar de lagrimas; y a una joven de cabellera dorada en un sueño profundo.
Enfermero: Joven, le pido que se ponga a un costado y nos permita ayudarla.
León: No, no pienso dejarla sola! Mucho menos soltar su mano.
Enfermero: Puede solamente acompañarnos hasta la entrada de quirofano, después deber dejarnos hacer nuestro trabajo.
Así sucedió.. León sostuvo la mano de la mujer de su vida, porqué eso era para él; hasta la entrada del quirofano.
Le costó muchísimo soltarla y ver como los enfermeros cruzaban ese gran pasillo con la mujer que tanto amaba.
León: Si se te llegara a pasar algo, no me lo voy a perdonar nunca Altagracia... nunca.
Esa frase lo destrozo al punto de sentarse en el suelo y apoyase en aquella columna de la sala de espera; a llorar como un niño chiquito.
El tiempo pasó, tanto... que se quedó dormido.
Cuando se levantó del suelo, sus ojos estaban hinchados y tenía un dolor de cuello incontrolable, pero no hizo más que correr a recepción para preguntar por Altagracia.
León: Señorita, disculpe... buenos días.
En la recepción se encontraba una enfermera dulce, pero algo atareada por que no se dio cuenta que alguien le había hablado, hasta que alzó su mirada y lo vio a León parado, esperando respuesta.
Enfermera: Perdón, buenos días. ¿En qué lo puedo ayudar?
Leon: Hace rato ingresaron a mi nov... mi amiga; era una joven, rubia y de ojos verdes. - Que lindo sería si fuera cierto, se dijo a él mismo por dentro; mientras esperaba.
Enfermera: Déjeme chequear.
León: Esta bien, gracias! - La enfermera le dedico una sonrisa y se puso a buscar.
Ella empezó a revisar el registro de pacientes ingresados, después de tanto buscar.. encontró a una paciente "X".
Enfermera: Supongo que debe ser la paciente sin registrarse.
León: Si, es ella. Mil disculpas, es que entro de urgencia y no deje sus datos.
Enfermera: No se preocupe, no le molesta si le hago unas preguntas sobre la paciente... así dejamos sus datos en el sistema?
León: Ningun problema. - León le dio los datos de la rubia, mientras ella lo mirada asombrada pero no sabía bien porqué...
Enfermera: Perfecto, ahora si le puedo dar noticias de ella.
León: Espero que no sean malas o graves, Altagracia es una chica muy sana; hasta donde sé.
Enfermera: Esperemos que así sea, tengo una pregunta más. ¿Puedo?
León: Claro, ¿que más necesita?
Enfermera: ¿Que vínculo tiene con la joven? Lo veo bastante preocupado por ella.
Esa pregunta lo dejo perplejo, ¿que le iba a decir?
Dudo unos segundos, pero sabía lo que quería decir..
León: Soy el novio, por?
Enfermera: Que suerte tiene Altagracia! Le consulté, porque lo vi algo confuso al llegar, es todo.
Leon: Es qué, no es nada oficial todavía.
