Tomé un autobús de regreso a casa para evitar perder demasiado tiempo caminando, además de que el distrito comercial se encontraba considerablemente lejos de los edificios donde vivía. Abrí la puerta del departamento y arrojé mi mochila al sofá, esquivando por unos centímetros a mi madre.
"Si me odias sólo dilo" dijo ella. "¿A dónde vas con tanta prisa?"
"Iré a ver a Nayeon" respondí. "Además, conseguí un trabajo."
"¿Conseguiste trabajo?" repitió mi madre sorprendida. "¿Dónde?"
"Una cafebrería del distrito comercial" respondí orgulloso. "Comienzo mañana a las nueve."
Antes de que mi madre pudiera hacerme más plática me metí a mi habitación y busqué la ropa que me pondría para la cita con Nayeon, tomé mi toalla y entré al baño.
Mientras esperaba a que se calentara el agua recibí una llamada de mi amiga.
"Hola Nayeon" saludé.
"Escucho eco" señaló. "¿Puedo ir a bañarme contigo?"
"Muy graciosa" dije de forma sarcástica. "¿Ya tienes en mente un lugar para visitar hoy?"
"Encontré un boliche muy cerca de la preparatoria" respondió.
"Creo que la única vez que llegué a jugar boliche fue cuando tenía como diez años" respondí. "Si quieres que pasemos vergüenza, yo me apunto."
"Tampoco es que yo sea muy buena" comentó mi amiga. "Solo fui una vez hace un par de años y terminó en desastre, pero podemos pasar un buen momento tú y yo."
"De acuerdo" respondí. "¿A qué hora nos veremos?"
"Como vives muy lejos tenía pensado vernos a las seis de la tarde."
"Eres muy considerada" dije. "Te veo a las seis."
"¿Seguro no me puedo bañar contigo?" insistió Nayeon.
"Adiós, Nayeon" dije colgando el teléfono.
Entré a la ducha y comencé a darme un baño relajante hasta que el agua caliente comenzó a menguar; cuando eso ocurrió salí del baño y me dirigí a mi habitación a vestirme.
Debido a mi visita a la cafebrería y mi nuevo trabajo ahí me sentí con ganas de usar un estilo similar al que usaría una persona que frecuentaba ese lugar: elegí un pantalón café, un suéter color mostaza y un cardigan abierto color rojo. No estaba acostumbrado a esa clase de estilos, pero me sentía cómodo y sabía que a Nayeon le iba a gustar.
Vi mi reloj, faltaban todavía dos horas para las seis de la tarde, por lo que me dispuse a dormitar un rato para matar el tiempo.
Configuré una alarma para que sonara diez minutos antes y dejé que Morfeo me arrastrara al reino de los sueños.
No recuerdo mucho sobre esos sueños, solo recordaba ver a las chicas en él y despidiéndose cada quien a su manera, siendo Nayeon la última diciéndome que me iba a esperar el tiempo que fuera necesario para volver a verme.
¿Será que estaba viendo un poco cómo sería el día que me iría a conocer el mundo?
Poco a poco las chicas se iban alejando del lugar donde estaba, aparentemente viajaba en tren hacia un destino desconocido pero que me daba mucha emoción saber.
Tras eso no hubo más sueños, solo el vacío y luces que parecían estar ahí para no ver solamente negro.
La alarma sonó y desperté sintiéndome tranquilo, emocionado y listo para mi cita con Nayeon.
![](https://img.wattpad.com/cover/106404953-288-k32381.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Precious Love
FanfictionLa preparatoria puede ser una de las experiencias más increíbles de la vida de una persona... Salvo que seas yo.