Kisses

OO5

—Goh, ¿Y a dónde vamos?— Preguntó el joven de Pueblo Paleta con curiosidad.

—A un lugar que te va a gustar— Decía un sonriente moreno.

El entrenador de Pikachu, aún con curiosidad de saber a donde iban, dejo que su pareja lo guiará.

Después de un largo camino, llegaron a su destino. Ash estaba sorprendido, ese lugar era especial para ellos.

Era el hermoso campo de flores, el mismo en el que se habían perdido  ya hace un tiempo atrás cuando Lugia los dejó ahí.

—¿Listo para pasar un agradable día?— Preguntó un entusiasmado Goh.

Oh, tal vez algunos se preguntarán sobre donde dejaron sus pokemons. Pikachu, Cinderace y todos los demás quedaron al ciudado del laboratorio Cerise.

Lo primero que hicieron fue destender el mantel en el suelo del campo para iniciar su picnic.

—¿Recuerdas el día que Lugia nos dejó en este campp?— Preguntó el de piel pálida, mientras mordia uno de los tantos sándwiches que han traído.

—

—Si, recuerdo que demoramos horas en llegar al laboratorio—  Río al recordar ese lindo y chistoso recuerdo.

Pokemons silvestres pasaban ppr el lado de ellos. Claramente ambos se emocionaban al ver pokemons en su estado natural.

Ambos comieron hasta saciar su estomago. Luego se acostaron sobre el mantel, mirando el hermoso cielo azul.

—Esa nube parece un Charmander— Dijo Gou señalando una nube.

—Y esa de ahí parece un Snivy— Ahora dijo Ash señalando otra nube.

—Si, oh, y esa parece un Caterpie—

Y así pasaron un buen rato jugando adivinando que pokemon parecían las nubes.

Algunos cuántos pokemons se les acercaba y ellos les daban algo de comer o jigaban con ellos.

El sol ya comenzaba a esconderse y con ello el atardecer, un hermoso atardecer, y también romántico.

Decidieron subirse a un árbol para ver mejor la hermosa puesta del sol.

Estando ya sentados en una de las ramas más gruesas  del árbol, Goh recosto su cabeza en el hombro de su pareja.

—¿Es lindo, no?—  Pregunto Ash. Goh lo miró desentendido. —El atardecer, ¿No es lindo verlo?—

—Ah, si, si es muy lindo—  Lo dijo en una.voz tan baja, casi como si no quisiera que lo escucharan.

Siguieron contemplando el atardecer en un silencio nada incómodo, de hecho era un silencio agradable.

—Oye Ash....— El de ojos azules fue el primero en romper el.

El entrenador de Pueblo Paleta volteó a mirar a su pareja.

—¿Te pasa algo?— Pregunto Ash.

—Ehm...hay algo que necesitó hablar contigo— Murmuró, pero aún así logró ser escuchado por el
contrario.

—Esta bien, te escuchó—

El chico de piel morena miraba a su alrededor, tanta vegetación, tantos pokemons; simplemente era un lugar pacífico, relajante y silencioso.

—Goh...— Llamo.

—Hay un tema que me tiene dando vueltas desde hace un tiempo...— Empezó a hablar el de Ciudad Carmín. —Y es algo que debemos hablar los dos—

El silencio por parte de Ash hizo que el menor alzará la vista, encontrándose con la mirada fija de su pareja. Sus rostros bastante cerca uno del otro.

Sus labios a una corta distancia. Tanta cercanía lograba ponerlos un poco nerviosos ambos.

La poca distancia que quedaba entre ellos fue cortada por ambos. Por primera vez sus labios habían encontrado, un beso algo torpe pero tierno.

Les juro que me costó escribir este capítulo, no tenía ni idea de como redactarlo, pero después de varios intentos lo logré :)

Cualquier error ortográfico me disculpan 😳