Ojos Rojos.

7. Ola de pasión.

Carlie.

Estaba en las nubes, nada podía distraerme de las sensaciones de ese momento, porque si una cosa es sexo y otra hacer el amor, la delicadeza de Jericho,sentía que  hasta podía tocar el cielo con las yemas de mis dedos,sentía placer, era magnífico.

La lengua de Jericho se movía fuerte pero exquisitamente, me encantaba como lo hacía, con un toque de fuerza pero delicadamente,como nadie me podría dar placer, porque es una conexión especial que nos lleva a disfrutar del exquisito placer de estar con quién amamos, estaba temblando de la pasión, sentía mi vista más clara, mi centro estaba mas mojado que nunca,mi vagina estaba recibiendo la mejor atención en la boca de Jericho, sentía como bajaban mis fluidos, calientes y en abundancia, mojaban mis piernas y mi trasero.

Definitivamente estaba en mi punto máximo, sentía mis piernas más débiles, mi respiración acelerada, el calor estaba en mí vagina, mis senos, mi rostro, esta ola de pasión me estaba matando exquisitamente, y llegué al tan anhelado orgasmo, Jericho subió rápidamente y entro en mi, con la fuerza suficiente pero sin dejar la delicadeza de lado, sentía como mi vagina se abría para el.

Era una penetración lenta pero con un toque de fuerza, me encantaba, me estaba enloqueciendo con sus embates, Jericho me hacía experimentar a lo grande, perdí la noción del tiempo y el lugar, lo único importante era disfrutar el momento.

Creo que este era el sentimiento que tanto había escuchado describir cuando se está con la persona que uno ama tal vez no conocía a Jericho hace demasiado tiempo pero era el amor de mi vida lo sentí en mi corazón.
No es simplemente el hecho de tener sexo se trata de amor conectar con la otra persona que uno está, la pareja tiene que hacernos sentir que solo somos  uno cuando está a nuestro lado, porque somos complementos perfectos.
Estar en los brazos de quién se ama es la sensación más maravillosa del mundo y lo digo por experiencia propia se encuentra la paz que inunda el corazón y va mucho más allá que el sexo banal  que seguramente se puede tener con cualquier persona mientras haya atracción, el amor es la conexión de corazones, que se siente cuando se hace el amor con la persona que amas, son el mundo entero.

Sentí el miembro de Jericó en mi interior, dentro, fuera, en una perfecta sintonía, sentía como mis paredes se abrían cada vez más, acogen cálidamente al miembro, cada vez me sentía más cerca del orgasmo, esto era el paraíso, mi respiración estaba cada vez más agitada, mis gemidos escuchaban fuertemente, Jericó no dejó de besarme los labios, el cuello, mis pezones erguidos, el clímax estaba cerca, me sentía cada vez más caliente, en ese momento Jericó me susurro al oído:

- Te Amo Mi hembra ...
Lo mire a los ojos, los ojos del amor, mi hombre de ojos tentación y eso basto para que con un gemido largo encuentré mi liberación con mi tan anhelado orgasmo, el punto más alto del clímax, sentía como  mi cuerpo temblaba, mi vagina era como un guante para el miembro de Jericho, de mi boca solo salían leves ruidos de placer, mis pezones se endurecieron, se sentía como las nubes.

No tardó en alcanzar el orgasmo Jericho, mientras gemía y lo apretaba en mi interior el alcanzo su orgasmo y se derramó en mi, toda su corrida en mi muy mojada vagina, sentía como me llenaba con su semen, su pene iba perdiendo tamaño, pero aún así era grande, llenaba mi vagina, la sentía estirada, era increíble como logré un orgasmo tan placentero.

Jericho salió de mi interior y me beso dulcemente, ya estaba recuperandome de mi orgasmo le pude decir:

- Te amo Mi tentación de ojos rojos.

Le regrese el beso y agotados por tan placentero momento de pasión, dónde unimos nuestros cuerpos y nuestros corazones, nos abrazamos y caímos rendidos en un sueño profundo, después de la increíble ola de pasión que nos llevo a un fulminante orgasmo mutuo, sentía como Jericho me hacía caricias en el cabello y en mi espalda, mientras caía en un sueño profundo...