Pasaporte

9

Helena

Cubro mi cara con mis manos, sintiendo mis mejillas arder y mi entrepierna palpitar, aprieto los labios y me levanto rápido del regazo de Wouters acomodando la tanga y corriendo al agua, lo escucho reír por lo bajo, pero no me importa, ¿Que tal que hubiese llegado alguien? Suspiró y me sumerjo con el agua fría aclarando mis pensamientos

Mi cuerpo se mueve por inercia una vez escucho la música, es una nueva canción, no puedo evitarlo la música vive en mis venas y una vez la siento no puedo evitar moverme, siento una mano fuerte rodear mi cintura y me quedo tensa girando la cabeza para encontrarme el cabello negro del hermano de Vanesa y sus profundos ojos negro

—Felipe — susurro — ¿Podrías soltarme? — me remuevo incómoda y más al llevar mi vista hacia la carpa que acabo de abandonar y esos ojos castaños me miran fijamente, con el ceño fruncido trago en seco y trato de salir del agarre de Felipe y no puedo

—¿No puedo abrazar a mi futura esposa?— Frunzo el ceño y clavo la punta de pie en el suyo haciendo que me suelte, mi mirada viaja de nuevo a Wouters que ahora tiene una cerveza en la mano, pero me sigue viendo con el entrecejo arrugado — ¿Es en serio, Helena?

Enarco una ceja, y el suelta un suspiro

»—No importa, es tu vida, espero que no olvides aquella promesa que me hiciste — frunzo más el ceño cuando se aleja, y no recuerdo bien a lo que se refiere, así que le resto importancia, camino a un columpio dónde está Vanesa haciendo muecas con su teléfono

Me siento al lado y también hago una mueca saliendo en la foto, se ríe y acomoda el celular sacando más selfies, y llama a su hermano que la ignora, cerrando los ojos, el que se acerca es el hombre belga con cabello castaño claro, casi rubio y ojos castaños

—¿Puedes tomarnos unas fotos, por favor?— le pregunta mi amiga haciendo un ridículo puchero y el se ríe entre dientes tomando el teléfono, hacemos poses parecidas entrecerrado los ojos del sol, nos regresa el teléfono y antes de que pueda verlas, me arrastra con el hasta el agua, camina hasta el fondo, haciendo que me agarre fuerte de sus hombros, rodeando su cintura con mis piernas

— Estaré una semana en Colombia — habla, muerdo mi labio inferior detallando las facciones de su cara, siento su miembro endurecerse con la fricción de mi cuerpo, al resbalarme, me agarra fuerte del trasero evitando que caiga, gruñendo

Reaccionando a sus palabras por fin entiendo a qué se refería con el que, "sería una semana interesante", pero que al huir de su regazo y sus dedos expertos no le di la atención que requería

—Oh, ¿Quieres hacer algo más entonces? — pregunto evitando la punzada de su miembro, Oculta la cabeza en mi cuello, mi cuerpo no supone peso para el, así que me aprieta con un solo brazo y con la otra mano acaricia mi mejilla

Muerdo mi labio, cerrando los ojos ante su tacto, y los abro despacio admirando sus ojos castaños, poniendo a latir mi corazón

Solo hemos hablado por un mes, nos hemos visto dos días

—Oh pequeña, quiero tantas cosas — susurra — ya te dije que será una semana, bastante entretenida, ahora disfrutemos de esto — señala el paraíso tropical frente a nosotros y se sumerge haciéndome cubrir la nariz para no ahogarme, golpeó su torso y se ríe fuerte sintiendo una calidez en mi vientre bajo que no quiero pensar

* * *

—Mami eso no es justo — me cruzo de brazos — sabes que no me gusta ir allí

—No me interesa, ha pasado tiempo — suspira — es tu papá, así que si el te pide que vaya, irás — hago un gesto de indignación — has estado todo el fin de semana fuera

Bufo

—No ha sido mi papá durante años — aprieto los dientes y mamá enarca una ceja — iré, además seguiré estando fuera, creo que me mudarse con Vanesa al apartamento de Felipe

—Bien, Alonso te llevara — me mira

Sacudo la cabeza

—Ire con Vanesa y Felipe, con ese señor no iré — rueda los ojos y asiente de mala gana

—Con referente a Vanesa y Felipe

—Aun no está decidido, así que no te des mala vida por ahora

Wouters: Hoy, llega a esta dirección, a las 7

Helena: lo siento señor Belga, este día no puedo

Gruño y voy a mi cuarto, echando ropa en mi pequeña mochila, reviso mi teléfono con la entrada de una llamada, la voz ronca, varonil con acento me hace apretar las piernas con fuerza

Dios ese hombre va a matarme, o hará que a mí vagina le de un colapso

—¿Cómo que no puedes?— suspiro

—Tengo que ir donde el que dice ser mi padre— digo entre dientes y en español, para que se sienta mi molestia

—Entonces iré contigo — intento refutar pero habla de nuevo — enviame la dirección

No puedo hablar porque corta la llamada, me quedo con el teléfono en la mano, como una pendeja, suspiró y escribo la dirección, de igual forma, mañana iría con el

Me visto y me despido de mamá, caminando a la estación de buses y me pierdo entre música hasta llegar al departamento de Felipe

El me abre la puerta sonriendo de lado, Vanesa está hablando animada por teléfono, y dejo la mochila a un lado, revisando mi teléfono

Wouters: Estoy abajo

Miro a mis amigos y me despido con la mano dejando el bolso allí, subo al auto que tiene alquilado desde que fuimos a la playa, y agenda la dirección de la casa de mi padre, dándome una mirada de reojo

—¿Cómo te vas a presentar? — pregunto con ironía, ir donde papá siempre me pone de mal humor — ¿Como mi patrocinador?

El se ríe, pero no me contesta indicándome que ponga música, me pierdo entre los paisajes de la ventana, mientras nos acercamos a nuestro destino, después de hora y media, llegamos a la casa de un piso, dónde vive mi progenitor, me bajo del auto, dando un portazo involuntario, una mano se cierne sobre mi cintura

—Me voy a presentar como el amor de tu vida — susurra haciéndome reír, y sacudir la cabeza al mismo tiempo

— "Mi novio" está bien — recalco la palabra en comillas, asiente y me extiende la mano, llamando el timbre

* * *

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