Domingo » Juan Pablo Villamil (Morat)

2. Thumbpicks

Su asignatura quiero aprobar 

Explíqueme otra vez la lección 

Deme una clase particular 

Señor profesor...

(Lolita - Orquesta Mondragón) 

Bogotá, 2014

Mayo

Me encantan los sábados en la tienda de música, porque son los días de más trabajo.

Suelo trabajar sola durante la semana, pero los fines de semana generalmente viene Jerónimo, y adoro trabajar con él.

Nos gusta la misma música, y en los ratos muertos solemos ponernos a tocar, algo que no ha sido posible el día de hoy porque son casi las 5 de la tarde y la gente no ha dejado de llegar.

Jeremy, como insiste en ser llamado, está hace casi una hora con un par de preadolescentes acompañados de sus padres, cerrando la venta de una batería que sin duda le va a dar una buena comisión.

Tenemos un acuerdo de conseguir buenas ventas entre los dos y luego partirlas en partes iguales, así que me ocupo de la venta de púas, cuerdas y accesorios para que él pueda dedicarse a conseguir nuestra comisión del mes.

Todavía tengo puesto el gorrito de cumpleaños dorado que me dio más temprano mientras nos comíamos el mini pastel que trajo para celebrar mis 19 años. Ha habido tanta gente que no he terminado mi rebanada de pastel, así que aprovecho el respiro y hundo el tenedor en el decadente reguero de chocolate y dulce de leche.

Elevo la mirada hacia el cielo, agradeciéndole a los dioses por el chocolate, solo para darme cuenta de que un par de risueños ojos verdosos son espectadores de mi drama.

Me ahogo con el trozo de torta.

- ¿Todo bien? – Grita Jeremy desde el fondo de la tienda. Le hago una seña de Ok levantando el pulgar, aunque sigo tosiendo

Histérico y más histérico vienen acompañados de otro chico con lentes que me recuerda vagamente a Harry Potter.

Les hago una seña de disculpa con la mano, mientras me inclino hacia el cajón que se esconde bajo el mostrador y saco mi termo de agua. Bebo un sorbo largo que suaviza un poco mi garganta lastimada.

Cuando vuelvo a emerger de detrás del mostrador, los tres me miran con expresiones risueñas.

- Lo siento – Les sonrío avergonzadamente – Bienvenidos a Clave de Sol. ¿En qué los puedo ayudar?

Se miran entre sí, y ahora son ellos quienes parecen tímidos.

Harry Potter se aclara la garganta y da un paso adelante.

- Nos robamos un banjo – Anuncia.

Parpadeo hacia él, esperando algo más, pero solo me da una sonrisita angelical.

Histérico número 1, también conocido como Villa, da un paso adelante para salvar la situación.

- Tenemos una banda y estamos buscando un sonido diferente. Vimos este banjo y lo tomamos prestado, porque nos gusta la huella sonora del country y pensamos que tenía sentido incorporarlo a lo que estamos buscando. Ya hemos hecho algunos arreglos con mandolinas y guitarras de 12 cuerdas, pero nada termina de ser lo que queremos – Explica