Pov narrador
Podemos ver a un grupo de seis estudiantes más o menos a escondidas caminando hacia el bosque prohibido, la noche del 05 de octubre del año 1994, por un llamado. Todos ellos estudiantes del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, sin hacer distinción de casas, estado de sangre, poder o habilidades.
Porqué están aquí? La respuesta es muy sencilla: su magia los llamaba a ir y, aunque ellos seis no eran los únicos, ellos simplemente ya no pueden resistir el llamado de la magia.
Se fueron acercando hacia un punto del bosque prohibido, sin darse cuenta la mayoría de que iban hacia el mismo lugar.
Los primeros en llegar fueron los Griffyndor Harry Potter, Hermione Granger y Neville Lomgbottom, conocidos por ser el primer lugar en mala suerte, en cada materia y en herbología práctica respectivamente.
Una vez ahí, se quitaron la capa de invisibilidad de encima y empezaron a buscar lo que sea que los halla llamado hasta aquí.
- Harry, ¿Por qué estamos aquí otra vez? - Preguntó Hermione, algo confundida
- Porque es de aquí de dónde viene el tirón a mi magia, supongo que puedes sentir la tuya calmándose - respondió Harry, ahora sabiendo lo que sentía desde la primera vez que había estado aquí.
Que cómo lo sabía? Sirius había logrado "secuestrarlo" antes de su último cumpleaños y como buen curioso, trató de aprender todo lo que pudo en la biblioteca Black, con el permiso de Sirius quién, después de estar en Azkaban, había entendido que Albus Dumbledore no era una blanca paloma y después de reflexionar en el asunto, se dio cuenta que era tan fácil matar a alguien con un hechizo de levitación como con la maldición asesina, así que no vió problemas en enseñarle a su ahijado más que unos pocos hechizos cuestionables y todo lo que sabía sobre la magia.
Su ahijado no sería pisoteado por nadie, si por el camino eso jodía a Dumblefuck era solo una placentera ventaja.
- así que, de noche en el bosque prohibido. Que diría su jefa de casa? - se escuchó una voz, para después aparecer un rubio de ojos Plata y actitud molesta para la mayoría de las personas. Draco Malfoy era su nombre.
- Si bueno, considerando que yo también estoy aquí podría darles una buena detención a todos ustedes - esta vez era una voz distinta, más suave, masculina y relajante. Era un chico de cabello castaño y ojos de color miel, un prefecto de Hufflepuff llamado Cedric Diggory.
- Todos nos meteremos en problemas si uno de nosotros habla - se escuchó una voz serena hablar, Luna Lovegood había llegado - así que les sugiero que dejen sus peleas y simplemente avancemos. - todos estaban un poco reacios, pero finalmente todos fueron guiados a un punto en el bosque prohibido.
Era precioso, un vórtice de magia tan poderosa que podías sentirla sobre tu piel, haciendo despertar a tu magia, incitándola a salir a la superficie y que se mezclara con esta magia salvaje, atrayente, que los llamaba a todos ellos a ir hacia él.
Harry fue el primero en acercarse, teniendo su baúl encogido en el bolsillo, la capa de su padre doblada dentro de su chaqueta y su saeta de fuego convertida en un colgante con ayuda de Sirius ese mismo verano. Al tocar el vórtice de magia, lo único que pudo sentir fue paz. Tomó la mano de Hermione, que era la más cercana a él en ese momento y entró en la acumulación de magia, jalando a Hermione en el proceso.
Eso provocó que casi todos terminaran en el vórtice, pues Hermione se había aferrado a la túnica de Diggory al ser arrastrada, Cedric al brazo de Longbottom y Neville terminó tomándose de la corbata del pobre Draco. Luna fue la única que no cayó en el vórtice por esa acción.
La pequeña rubia se había alejado, pidiendo el permiso de un tronco para usarlo como escritorio. Por un momento, un área del tronco se alisó y aplanó, quedando un área perfecta para escribir. Una nota fue escrita en un trozo de pergamino, escrito para los otros en Hogwarts que ella sabía también eran llamados por esta singularidad. El pergamino fue doblado en forma de cisne y el cisne fue tocado por una varita, cobrando vida y volando hacia el tercer integrante del trío de oro. La creadora de la nota sonrió, agradeció al árbol (que volvió a su forma original) y dijo con una voz suave y soñadora a la nada
- Espero que el resto nos siga pronto - y soltando una pequeña sonrisa, ella también saltó al vórtice de magia.
Lo que ellos no supieron, es que el vórtice pareció estabilizarse en el claro del bosque prohibido esa noche y en toda Inglaterra, los magos que aún agradecían a la madre magia por sus dones sintieron a su protectora y guardiana mucho más calmada. Poco a poco, todo iba cayendo en su lugar y pronto, sus hijos serían liberados una vez más.
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Para los que preguntaron por la idea descartada de este fic (Momo-pito-tieso te estoy mirando a ti) aquí está.
Supongo que lo único que se está quedando igual por ahora es que hay magia en Kimetsu no Yaiba y que el punto de acceso entre Hogwarts 1994 y Era Taisho, Japón está en lo hondo del bosque prohibido.Alguna duda? Pregunta? Comentario?
Si uno de ustedes tiene la intención de usar este escenario para hacer un fanfic tiene mi permiso. Lo único que les voy a pedir es que me etiqueten en la historia, tengo curiosidad de cómo se desarrollaría.
Y, sin mas que decir:
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Dragón fuera
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En este nuevo mundo... Por la espada seré libre
FanfictionADVERTENCIA: Esta historia está en pausa Donde después de que el mundo mágico lo decepcionara, un ángel que no puede salir al sol lo lleva al suyo porque simplemente no pude evitar escribir esta historia y porque no hay suficientes crossovers de est...