Adicto [L.S]

Capítulo 6

△▲△▲△▲ Atracción fatal ▲△▲△▲△▲

Harry estaba cada vez más perdido en las manos del ojizarco, sus finos dedos que tocaban guarramente su bóxer, mostrándole, invitándole a descubrir que había debajo de esa tela, su mente estaba en un completo caos. Harry se comportó de manera extraña, aun no sabía cómo su cuerpo mordió tan descaradamente el trasero de su vecinito, no entendía porque su cuerpo se negaba a seguir las órdenes de su cerebro, se estaba frustrando el ojizarco se metía bruscamente en su mente provocándolo a hacer cosas extrañas.

Louis vio desde esa posición tan desvergonzada como el rostro del rizado cambiaba de ser uno lleno de lujuria a uno de preocupación las cosas ahora no iban tan bien como hace segundos, al parecer Harry estaba luchando internamente con su "yo" moral y Louis no iba a arriesgarse a perder tal bocadillo.

— Ya veo — dijo Louis terminando aquel acto tan guarro que hacía con sus manos para levantar sus pantalones y colocárselos nuevamente – Te asustaste ¿no? – sus labios dibujaron una silueta formando una linda sonrisa maliciosa burlándose del miedo del rizado. El ojizarco se dio vuelta y se sentó rápidamente en el sillón bajando su remera acomodándose para volver a estar cubierto por completo.

— Yo... — Harry aun perplejo sentado en la alfombra del living estiro su mano para alcanzar una rodilla del ojizarco. — Realmente no sé cómo... — corrió la mirada, se estaba sintiendo un virgen ¿no sabía cómo qué? ¿Follarse a un hombre? ¿Eso solo le interesaba? ¿¡Qué diablos estaba pasando con su consciencia!? ¡Más importante es que era un hombre! Pero la atracción que sentía por su vecino no era normal.

Una risilla salió de los labios del ojizarco con una voz un tanto creída – ¿No sabes hacer qué? – Louis se inclinó hacia abajo quedando sus rostros algo cerca de la boca del rizado deseando escuchar lo que tanto afligía a su amiguito Harry no estaba dudando de follárselo por ser un hombre, tan solo estaba inseguro de hacerlo con un hombre, ¿Cómo se haría? No es igual que con una mujer, podría lastimarlo y nada de eso sería bueno. Louis recobro su confianza, volvió a entrar en el juego, Harry era bastante predecible con sus acciones y muy honesto.

Las palabras de Harry no salieron y tras un par de segundos Louis rompió el silencio — Si tú quieres yo puedo enseñarte. — la voz de Louis salió profunda y provocativa – Además me encanta escucharte gemir por mí. – paso suavemente la yema de sus dedos por el sensible cuello del rizado.

Harry podía sentir la respiración del ojizarco chocar contra sus labios era embriagador y sus dedos prenderlo fuego lentamente, su inseguridad se esfumo, el calor no lo dejaba pensar con claridad, sus ojos se entrecerraron mirando como los labios de Louis modulaban cada palabra tan lento y sexual. Su interior tenía sed de él, su respiración se tornó profunda estaba siendo manejado cruelmente por su lindo vecino que no sabía que tenía que lo hacía perderse como un tonto y decir cosas que salían de lo más sucio de su ser.

— Ponte en cuatro... — Harry ordeno transformando su voz en una grave y autoritaria. — Necesito verte. – su necesidad era tal que agarro las muñecas del ojizarco obligándolo a apoyar las manos en el suelo.

— Tus cambios de humor realmente me prenden fuego. — Louis giro su rostro lamiendo toda la extensión de los finos y suaves labios del rizado lo que provoco un suspiro tembloroso proveniente de Harry que instintivamente saco su lengua degustando la erótica lengua del ojizarco.

El contacto de la lengua del ojizarco contra la de Harry le hizo perder la cabeza, apretó con fuerza sus brazos mostrándole que lo necesitaba ya. Lo movió bruscamente volviéndolo a la posición de antes, separando sus rodillas pegando su cabeza sobre el sofá, quito con furia los pantalones deportivos grises que este tenía quitándole una risilla de ansiedad la respiración del ojizarco se estaba agitando amaba esa agresividad y sus manos dejaban todo caliente a su tacto. Harry se quedó observando tras la tela lo glorioso que era ese trasero a pesar de poder ver un bulto más debajo de su lindo culito esto lo único que provoco fue más morbo, se mordió su labio inferior con fuerza y comenzó a masajear las nalgas del ojizarco acercándose más a este, se sentía tan firme esos glúteos, corrió su mirada encontrándose a Louis mirándolo con una cara de súplica y su pecho comenzando a inquietarse por la falta de aire; Harry le dedico una sonrisa lasciva y le pego una nalgada algo dura.