°Destino Atormentado° [Okane ga nai ]

Capítulo 15: || Por celo ||

○●○●○

— Muy bien Ayase lo primero que debemos hacer es empezar a trabajar el terreno — Habló Ron con entusiasmo. Estaban en el jardín de la mansión teniendo una platica de negocios.
— ¿Kanou cuanto terreno podemos invertir de comienzo?

Kanou que iba por su segundo cigarro del día, inhaló un poco el humo para luego soltarlo con suavidad.

— Que sé yo. Tú eres el experto — Ron rodó los ojos. Para ser un exitoso prestamista no provee ideas.

— ¿Cuánto terreno tienes?

— Unas 10 hectáreas creo — Dijo dando una calada — Sí él negocio fluye podría comprar más terreno o apropiarme de los que no han pagado su prestado — Lo último lo dijo sin ninguna sensibilidad.

— Con esas 10 podemos empezar a trabajar por ahora — Ayase prestaba mucha atención, pues Ron era solo un guía, el negocio era literalmente suyo. Ron ayudante, y Kanou financiador, pero suyo al final.

Estaba emocionado y podría decir que en años nunca había sentido este tipo de energía gozosa. Este tipo de ilusión, que le daba alegría y cierta autoconfianza. Aunque también sentía mucho temor y en las noches cuando pensaba en ello en su desvelo, una gran fuerza le hacia querer renunciar, e interminables voces en su cabeza, curiosamente con la voz de su tía y su primo le repetían que era un error, que no podía, que solo fracasaria ridículamente, que era un inútil y patético omega.

Pero una parte de él escuchaba la suave y  tranquila pero imponente voz de Kanou diciendo lo contrario.

— Lo primero es preparar esa tierra, esto es simple debemos limpiarla, mullirla y abonarla. Tengo la serie de mejores productos de abono y tengo un proveedor que me da el 50% de descuento por mis compras. Tendremos ese campo resuelto — Continuaron la caminata por los alrededores del jardín— Conozco los operadores de maquinaria para el trabajo, podemos....

°•°•°•°•°

Ayase trajo su bandeja de comida junto con la de Kanou. Puso el plato frente a él, que ya esperaba la comida.

— No es necesario que sirvas tú la comida —  Dijo al ver la cena. Ayase le sirvió en su vaso el jugo.

— Me siento más cómodo así — Iba a sentarse al otro extremo de la mesa como es comúnmente cuando cenan juntos, pero la mano de Kanou en su brazo lo detuvo.

— Siéntate aquí

Ayase lo miró unos segundos, pero lo hizo. Se sentó en lugar al lado de Kanou.
El alfa se sintió más satisfecho, así de cerca podía apreciarlo mejor y disfrutar de su exquisito aroma.

— ¿Te has sentido mejor últimamente?¿Hay algún problema de salud que querías decirme? — Dijo comiendo un trozo de pollo a la plancha mientras leía el periódico de hoy.

— He estado muy bien alfa, gracias a usted — Habló humildemente.

— Sí. Si no te hubiera pedido que siguieras el tratamiento, podría haberse convertido en algo grave y podrías haber muerto. Pude haber perdido mucho — Ayase bajo la vista ante estas últimas palabras.

Es obvio que si él moría Kanou perdería mucho, ha invertido demasiado en él como para que se muera, era lógico que esta situación le molestaba.
Se sintió apenado, y hasta triste, pues es certero que la única pena que tiene su muerte es todo lo que se invirtió en él, como un negocio que acaba mal, no hay otras razones de las que porque llorar su muerte. Ni su tía, ni su primo...ni Kanou.