Corazón remendado

Lugar seguro

México busca ropa para darse un baño. Su maleta luce un poco desordenada. Se fue de la casa del alemán sin decir nada más. Se sentía molesta, pero sobre todo herida. ¿Cómo puede dudar de ella? El único lugar seguro al que se le ocurrió ir fue la casa de sus padres.

Mex- Seguro que a él ni le importa, es más, hasta aliviado se habrá de sentir.

Arroja con furia unas prendas en la cama. Algo en su maleta llama su atención. Es el saco de Alemania, el mismo que le dio después de defenderla. Lo toma, huele aun un poco del perfume del hombre.

Mex- ¿Por qué cada que doy un paso hacia ti tú haces que de dos hacia atrás?

Tocan la puerta.

Imperio- Mi niña, ¿estas despierta?

Mex- Si papá- vuelve a colocar la prenda en la maleta.

El hombre pasa con una bandeja en sus manos. Lleva algo de comida.

Imperio- Pensé que tendrías hambre.

Mex- Gracias, aunque no tengo mucha hambre.

Imperio- Tienes que comer por tu cría.

Mex- Si, lo sé. Ya no soy solo yo.

Imperio- ¿Te arrepientes acaso?

Mex- No, solo. Todo es tan complicado. No esperaba que fuera como en los cuentos con el "Y vivieron felices por siempre", pero esperaba que no fuera todo tan... Lo amo, se lo he demostrado. Entonces, ¿por qué insiste en hacerme sentir de este modo? ¿Por qué los hombres son tan idiotas?- mira la cara confusa de Imperio Español.- Lo siento papá es solo que...él es tan...perdón.

Imperio- No te disculpes. No es el motivo por el que estas así. Pero si te sirve de consuelo. A veces hacemos tonterías por el amor que tenemos a alguien. Y algunas veces esas tonterías solo lastiman a quienes amamos.

Mex- Aunque no sé si realmente él me ama.

Imperio- ¿Qué quieres decir?

La puerta es tocada.

Azteca- Cariño, ¿puedes bajar un minuto?

Los tres van a la sala. Se encuentra a Alemania.

Ale- Mexiko.

Mex- ¿Qué hace él aquí?

Azteca- Solo escúchanos. Alemania, ¿puede...?

Alemania retira el mantel que cubre el cuadro. La imagen aparece.

Imperio- Nuestra pequeña, creí que jamás vería esos ojos de nuevo.

Mex- Pero, no soy yo.

Azteca- Lo sabemos. –la pareja mayor se mira entre sí, el hombre asiente.- ella, es nuestra hija. Nuestra hija biológica.

Mex-¿Qué?