CAPÍTULO DIECINUEVE

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Parece que las compras realmente son la cura a todo, Taehyung parecía haber olvidado el incidente del restaurante y ahora estaba feliz. Aunque la verdad, la felicidad de Kim iba a costarle unos cuantos miles de dólares a Jungkook.

Esferas para el árbol, para guirnaldas en la cocina, escaleras, adornitos en general para el comedor, habitaciones, series para toda la casa... inflables para el patio... que puedo decir, supongo que a Tae en verdad le gusta la navidad, aunque me parece ridículo que quiera decorar cuando estamos a dieciocho de noviembre.

Se agradece que debido a la hora,  muy poca gente se encontraba en el establecimiento y poca gente reconocía a Taehyung, a pesar de su extravagante vestimenta. 

El auto de Jungkook solo pudo almacenar los decorativos pequeños, el resto sería transportado por un camión de la tienda. Seokjin se aburrió en los primeros treinta minutos, así que llamó a un uber para irse con Yeontan a casa.

-Tendrás que pagarme de alguna manera todas estas cosas, bebé- 

Sabrá el universo cuantas cogidas le iba a dar Jungkook hasta que considerara que la deuda de Taehyung estuviera saldada. Pero era obvio que Tae prefería pagarle con su cuerpo que con dinero, que ahora, tenía en abundancia. 

-Bueno... supongo que alguna fantasía debes tener, yo puedo cumplirla- dijo el modelo en un tono perverso, mientras acariciaba el muslo del hombre al volante.

De inmediato Jungkook sonrió con picardía

-Si, si la tengo, pero es un poco sádica-

En ese momento, llegaron a la casa. Jungkook estacionó el auto en el garage, pero no se bajó de este.

-Taehyung, ¿alguna vez te has vestido con lencería de mujer?-

De inmediato, el modelo se sorprendió.

-No, nunca- titubeó

-¿Qué te parecería dejar que yo te folle mientras traes puestas pequeñas ropas transparentes?- dijo Jeon mientras se giraba sobre su asiento para quedar de frente al castaño

Taehyung tragó saliva, mientras sentía como su cuerpo empezaba a sudar. ¿porqué eso le resultaba sumamente excitante?

-yo... creo que podría hacer eso por ti...- el modelo atrapó los labios de su novio con los suyos y ambos empezaron a besarse frenéticamente. Sus lenguas chocaban de vez en cuando y tae sonreía a mitad del beso, delatando cuanto lo estaba disfrutando.

-Deberíamos ir al asiento de atrás- sugirió Jungkook mientras abría la puerta de su lado. 

Entendiendo de inmediato, Taehyung se apresuró a cambiarse de asiento, esta vez Taehyung se subió encima de su novio, empezando a quitarse las prendas de arriba. Las manos de Jungkook se posaron en las caderas del castaño, quien ya había desabrochado el cinturón del pelinegro y arrojado lejos de él.

-Taehyung....- gimió Jeon por lo bajo 

El modelo se retiró de encima de su novio y se sentó a su lado, pidiendole que se quitara el pantalón y los bóxers. Jungkook obedeció y tan pronto el miembro de Jungkook vio la luz, Tae lo metió a su boca, succionando los centímetros que a su boca le cabían. 

Jeon tomó los cabellos de su novio, teniendo control de sus movimientos. Involuntariamente, el pelinegro empezó a follar la boca de Kim, quien se estaba atragantando con esto, pues el pene de Jungkook no le cabía completo en la boca, era muy grande para él.

-Dejame cogerte Tae... ya no... no puedo- gimió el hombre mayor

De inmediato, Taehyung se quitó toda la ropa de abajo y se volvió a sentar a horcajadas en su hombre.

HABITS (Kooktae) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora