Christopher
Levanté la vista de forma automática cuando escuché la voz de Rachel. Sonreí cuando ella se río de forma burlona hacia Parker.
Me puse de pie cuando ella se preparó para irse. Mi mandíbula se apretó cuando Parker se paró e intento seguirla.
―James. ― Llamé con el ceño fruncido desde la puerta.
Ella camino hacia mí ignorando a la persona a su espalda. Sentí como si así tuviera que ser, sus ojos llenos de mí.
Rachel se mordía el labio como si algo le resultara gracioso. Tuve la intención de preguntar, pero lo más probable era que estuviera pensando alguna estupidez.
La seguí mientras ella salía del salón. No se cuantas chicas me interceptaron, pero Rachel se mantenía tranquila y se detenía a cada tanto a esperarme como si no le importará.
En la quinta ocasión, deliberadamente hice tiempo con la chica, esperando que Rachel dijera algo o se molestará, pero solo se detuvo y se dedicó a mirarme.
― ¿Qué? ― Inquirí cuando sentí que ya habían pasado muchos minutos.
―Nada. Te estaba esperando. ― Se encogió de hombros como si nada.
Apreté el móvil en mano e ignoré a la chica a la cual ni había mirado.
― ¿Son ciegas? ― Se burló.
―No te pongas celosa, James.
Giré los ojos.
Se río con sorna. ―Ya quisieras que esté celosa por ti.
Sí quise decirle. No dejes que se acerquen a mí, ten los mismos celos que tengo cuando veo a cualquier idiota mirarte.
―No lo ocultes, sé que te enamoraste de mí. ― Baje la mirada a mi móvil, esperando a que respondiera.
El silencio que siguió me hizo mirarla de reojo, ella me estaba mirando de forma fija los labios.
Quise sonreír con superioridad cuando desvió la mirada y se aclaró la garganta para cambiar de tema.
―Rachel, Christopher. Siento como si le hablaran a mi papá cada vez que dicen James. ― Pidió.
No respondí y miré sus labios. Quería chupar su boca inteligente, no señale que no se había soltado de mi agarre, estaba disfrutando la sensación de su piel en la mía.
―Gracias de nuevo por cierto y estoy bien. ― Se soltó como si estuviera huyendo.
―Te veo luego Rachel.
Sonreí y saboreé su nombre en mis labios.
Poco a poco, me dije a mi mismo.
El timbre sonó, el almuerzo. Salí del salón sin esperar a los demás, me encaminé a la cafetería. Entré y Rachel estaba hablando con el asistente de la cocina.
El estúpido se sonrojaba cada vez que ella le sonreía. Apreté los labios, había demasiadas moscas a su alrededor.
Tomé una bandeja y me paré a un lado de ella. Me incliné hacia su oído sin dejar de mirar al idiota que se había quedado rígido cuando aparecí.
― ¿Te gustan los peleles, Rachel? ― Susurré lo suficientemente alto para que el tipo me escuchará.
Se quedó estática cuando respiré en su oído. Me miró con molestia, pero sus pómulos estaban sonrojados.
―No escuches al idiota Step. ― Rachel me empujó con el hombro y tomó su bandeja yéndose.
Me lamí los labios y esperé a que me sirvieran la comida. Le dirigí una mirada burlona al tipo y seguí a Rachel.
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FANFIC PECADOS PLACENTEROS
RomanceEs fanfic medio Chrischel, medio Parkchel idk. Los personajes no son míos, son pertenecientes a la trilogía Pecados Placenteros de Eva Muñoz. Si no te gusta, no lo leas y fin.