{[𝕋𝕖 𝔼𝕟𝕔𝕠𝕟𝕥𝕣𝕖́ 𝕖𝕟 𝔼𝕤𝕥𝕒 𝕍𝕚𝕕𝕒]} 𝔾𝕚𝕪𝕦𝕦𝕋𝕒𝕟 :3

|ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟛|

Pov Narradora:

- Tanjiro

- Sanemi...

- ¿Podemos hablar...? por favor...

- ...

- No te quito mucho tiempo, es rápido.

- suspiró- ¿Bien, de que se trata?

- Es sobre... el bebé...

Tanjiro se congeló al oír eso, ese tema no había sido tocado hace tiempo.

- Qué pasa... con el bebé?

- Necesito que lo cuides por unas semanas, tengo que salir de trabajo e Iguro no puede cuidarlo.

- Yo...

- Por favor Tanjiro, me lo prometiste, si llegaba a requerir algún favor del bebé, me ibas a ayudar.

- ...

"¡Maldita sea! ¿Porque me pasa esto...? ¡Y ahora que tengo mucho trabajo! Pero no tengo opción, también es mi responsabilidad cuidarlo... ¿¿Porque elegí tener un bebé??"

- Está bien... tráemelo mañana a las 11:00 a.m.

- Gracias Tanjiro...

- No hay de que, ¿tienes la comida? O ¿tengo que comprar?

- No, no, si tengo.

- Bien... te veo mañana.

- Está bien, adiós...

"Tan Tan..."

A Tanjiro le entro ese sentimiento de nostalgia al ser llamado así. Su relación con Sanemi no había sido como el esperaba, fue muy... complicada.

Por la mañana amanecían bien, todo era paz, amor y tranquilidad. Pero llegaba la noche y eran puras peleas.

Nunca llegaron a los golpes, pero si la relación continuaba, no dudaba que empeorara.

Pero llegó un pequeño regalito a sus vidas, que hizo que los dos quedaran de cierta forma... atados.

Era de mañana y Tanjiro seguía dormido, la hora extra de trabajo que tuvo que hacer ayer fue agotadora.

También tenía que hacer trabajo de la universidad, y para colmo, hoy le traían a su bebé...

No es que el odiara ese ángel, para nada, lo amaba con todo el corazón, pero... de cierta manera también le dolía verlo.

Era como si volvieran todos los momentos qué pasó junto con Sanemi, los buenos, y los malos.

Aún así, lo quería, era un chico muy bien portado, y muy lindo.

Se levantó de la cama y se fue directamente al baño, se lavó la cara y los dientes. Se alistó para salir al trabajo, ya que hoy había cambiado su horario para en la tarde, ya que si iba en la mañana, no podría recoger a al niño.