KONOSUBA - UN FUTURO PECULIAR

Capítulo 1: ¡Cita con mi gran familia!- Parte 4

El primer día comenzó y con ello mi cita con Megumin estaba por iniciar, realmente no tengo nada planeado, así que supuse que ella se encargaría de esto. Me levante y baje las escaleras, al parecer nadie había despertado por lo que solamente me senté en el sillón. 

-Que extraño, normalmente las chicas estarían preparándose para ir trabajar.

Estuve sentado por muy poco tiempo cuando se empezó a escuchar mucho ruido acercándose desde el segundo piso.

-Deben ser ellas.

Dije para después levantarme del sillón.

Camine y me pare frente a las escaleras, en ese momento una hermosa mujer empezó a bajar por las escaleras, rápidamente me di cuenta de que era Megumin, lleva un bello vestido rojo el cual llega hasta sus muslos y resaltando su cadera con un cinturón negro. Unos guantes negros y un collar de perlas que le había regalado en alguna de nuestras primeras citas. También lleva unos tacones de color negro. Se veía realmente hermosa, además de que llevaba algo de maquillaje, y si, es una belleza.

-Hola mi caballero.

Megumin dijo mientras se paraba a lado mío.

Yo todo un caballero agarro su mano y la beso.

-Esta lista para irnos mi lady.

Le seguí el juego y ella río ante mi impresionante frase nada cliché.

-Espera un momento, falta alguien muy importante.

Me quedé algo confundido y de repente las chicas bajaron las escaleras mientras Darkness cargaba a mi pequeña niña Narumi la cual lleva un vestido del mismo color que el de su madre pero mas holgado, se ve realmente adorable.

Darkness bajo a Narumi y esta camino hacia mi - Papi - Dijo con su tono algo monótono y feliz pero adorable como siempre.

La sujete y la levante para cargarla.

-¿Entonces será una cita en familia?

Pregunte a la radiante Megumin que solo tomó mi mano.

-Por supuesto.

Dijo emocionada.

-Pensé que solo seriamos nosotros dos.

No es que me queje pero de alguna manera esperaba algo mucho mas de pareja y apuesto que no solo yo.

-Así era pero Narumi no paraba de llorar y les prometimos a nuestros hijos que también pasarían tiempo contigo así que decidimos que era la mejor manera.

Al menos utilizare la noche para echárselos en cara y divertirme mas de la cuenta con ellas.

-Esta bien, lo acepto.

Y por fin nuestra cita comenzó.

...

...

Lo primero que hicimos fue salir de casa y caminar por la ciudad.

-¿Y adonde iremos?

Pregunte nuevamente.

Ella solo me miró con una sonrisa.

-No tengo idea.

De alguna manera... me lo había imaginado.

-Lo suponía, después de todo la cita fue algo realmente repentino y ni se diga de traer a Narumi, básicamente nos acaba de acortar enormemente las opciones.