𝔞𝔪𝔬𝔯𝔱𝔢𝔫𝔱𝔦𝔞 ~ 𝐟𝐫𝐞𝐝 𝐰𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧

4

Las manos de Fred habían llegado a su cintura y la sostenían tímidamente en su sitio. Sus labios apenas se movían, pero eran suaves y Ruby se sentía como en casa.

El Gran Salón estalló en gritos y vítores, sobre todo desde la mesa de Gryffindor, al ver que los dos estudiantes se besaban con tanto entusiasmo frente al resto del salón.

"¡Bien hecho, Weasley!"

"¡Por fin!"

"Te tardaste un poco, ¿eh, Fred?"

Fred se separó de ella con los ojos muy abiertos. Ruby no entendía por qué se veía tan sorprendido, si ella lo amaba tanto, ¿qué posibilidad había de que él no sintiera lo mismo?

"¿Ruby?"

"No te vayas, Freddie" le pidió y lo rodeó con los brazos, enterrando el rostro en su suéter.

Ruby no podía entender por qué le había tomado tanto tiempo. Ahí estaban, como tantos años habían estado, pero era definitivamente diferente. Podía escuchar el corazón de Fred debajo de su uniforme, y le llenó el alma al averiguar que latía tan rápido como el suyo.

"¿Ruby?" preguntó de nuevo.

"¡Prescott!" escuchó desde la mesa de Slytherin, "¿Esa no es tu novia?"

"Ruby, creo que deberías soltarme" le dijo Fred poniendo sus manos sobre sus brazos, tratando de quitarla de encima.

"¿Qué pasa?" preguntó Ruby con los ojos llenándose de lágrimas y la angustia asentándose en el pecho. "¿Es que no me quieres?"

Fred la miró compungido. Miró por encima de ella, desesperado, y Ruby pronto sintió a George y a Lee a su lado.

"¿Y si nos vamos todos a la Sala Común?" ofreció George.

"Excelente idea" aprobó Lee.

"¿Vienes con nosotros, Freddie?" preguntó Ruby. Lo único que le importaba era que Fred se quedara con ella.

"Claro"

Caminaron juntos, como siempre, pero no habían alcanzado a salir del Gran Salón cuando Ruby tomó la mano de Fred en la suya, apegándose a él y tomando su brazo con la mano libre. Cualquiera que la hubiese visto se habría dando cuenta inmediatamente de que algo raro ocurría.

"¡Ruby!" la llamaron desde el Gran Salón.

Ruby se volteó a mirar hacia atrás. Era un chico de cabello negro y lustroso, peinado hacia atrás en perfectas ondas.

"¿Sí?"

El chico la miró estupefacto. Vestía el verde esmeralda de Slytherin, y Ruby sabía que lo conocía, pero le importaba tan poco que ni si quiera se molestó en pensar de dónde.

"¿Estás con Weasley?" preguntó, viéndose algo dolido. "¿Eso significa que ya no nos veremos?"

Ella miró a Fred. Lo había visto tantas veces, y ahora no podía concebir dejar de mirarlo.

"Sí" le respondió encogiéndose de hombros, "¿no crees que hacemos linda pareja?"

Fred estaba rojísimo. Ruby seguía aferrada a su mano mientras Adam los miraba como si estuviera viendo al profesor Snape en su bata de noche y pantuflas. Sin decir nada, se encaminó de vuelta al Gran Salón.

"¿Sigues creyendo que fue una buena idea?" preguntó George a su gemelo.

Fred no dijo nada. En cambio, dejó que Ruby lo guiara a la Sala Común de Gryffindor, con George y Lee siguiéndoles el paso.

"Deberíamos hacer algo para oficializar nuestra relación, Freddie" dijo Ruby muy alegre mientras saltaba a su lado.

"¿Más oficial que ese beso?" preguntó Lee.

"¡Algo especial!" le respondió Ruby, "tal vez unos anillos a juego. ¡O quizás unos tatuajes con nuestras iniciales! He estado practicando el encantamiento, creo que ya casi..."

"Ruby" la detuvo. "No vamos a hacernos tatuajes a juego"

Su corazón se partió en mil pedazos. ¿Qué estaba ocurriendo? ¿Por qué Fred no la amaba desesperadamente como ella a él? ¿Por qué no quería llevar sus iniciales en su piel?

"¿Por qué no?"

Sintió un nudo en la garganta. El llanto comenzó a acumularse en sus ojos mientras George le daba la contraseña a la Dama Gorda para que los cuatro pudieran pasar a la Sala Común.

"Ven aquí" le pasó un brazo por los hombros y la condujo a un sillón de felpa, donde se sentó con los tres chicos mirándola.

"Freddie" dijo inclinándose hacia adelante y tomándole las manos, "¿Qué pasa?"

Fred no le dijo nada, pero tenía una expresión terrible en el rostro.

"Rayos, Weasley" dijo Lee, "¿Qué le hiciste a Garland?"

"Más bien qué le dio" dijo George.

"No" Lee se echó hacia atrás para ver mejor a su amigo. "¿Fred? Dime que no lo hiciste, ¿amortentia?"

"¡Sólo era una broma!" se defendió, "Ruby siempre dice que nunca podría sentirse atraída por mí, quise hacerle una pequeña broma, sólo eso"

"Pues creo que se te pasó la mano" comentó George, "¿Cuánto le pusiste? ¿La botella completa?"

"¡No!" respondió Fred, poniéndose de pie, "La dosis indicada eran diez gotas. Por Merlín, ¡Le puse cinco! Sólo quería una pequeña atracción para molestarla un poco, ponerla nerviosa"

Ruby no estaba escuchando. Estaba demasiado ensimismada viendo las pecas en el rostro de Fred. ¿La luz siempre le había llegado así a los ojos?

"Algo salió mal" opinó Lee con una risa nerviosa.

"Te dije que esto pasaría" dijo George.

"No necesito sermones, George. ¿Tienen alguna idea aquí?"

Los tres se miraron, perplejos y derrotados.

"Ya sabes lo que tienes que hacer, Freddie" se rio George cruzándose de brazos.

Fred suspiró pesadamente. Se puso de pie y le ofreció la mano a su amiga.

"Vamos, Ruby. Vamos a la enfermería"