Hanagaki Takemichi es un omega de catorce años, quien tuvo la mala suerte de verse envuelto en una batalla perdida con Kiyomasa y sus lacayos, convirtiendose en uno de sus "esclavos".
Con las intenciones de proteger a su amigo, Takemichi decide enfr...
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Mikey sentía las ganas de pasarse de largo los semáforos en rojo, pero no quería terminar en la cárcel, y mucho menos seguir estando lejos de Takemichi; se vio obligado a tener que aguantar esperar las luces rojas, que parecían ponerse de acuerdo para retrasarlo más y más.
Y al fín, después de tanta lucha contra todo el problema de los semáforos; ya estaba frente a la puerta de la casa de Takemichi. Tocó el timbre un par de veces y espero al rededor de unos tres minutos, nadie salía aún. Volvió a tocar y esta vez siendo más insistente, tras la puerta logró oír un fuerte ruido de multiples cosas cayendo; la puerta se abrió levemente solo dejando mostrar una parte del rostro del oji azul.
-¿Mikey-kun? ¿Por qué estas aquí?- interrogó con vos baja, y ligeramente ronca.
-Oh, eso...- Manjiro sacó la libreta que le había entregado el omega de hace varios minutos atrás; se lo mostró al menor y escuchó un suspiro por parte del mismo -Takuya me pidió que te entregara sus apuntes-
La puerta se cerro con delicadeza y al escucharse como quitaba el cerrojo segundos después la volvió a abrir, esta vez completamente, dejando ver que Takemichi traía puesto un pijama simple de color azul pastel, el rostro alegre que Mikey esperaba ver era remplazado por uno decaído. Las ojeras eran demasiado notables incluso desde lejos, sus ojos estaban ligeramente rojos como si hubiera llorado pero no podría ser eso ya que no estaban hinchados, además se tambaleaba débilmente.
-Muchas gracias por tomarte la molestia Mikey-kun, le agradeceré a Takuya después- por curiosidad Takemichi abrió la libreta viendo todos esos apuntes, pero se detuvo de voltear las páginas cuando notó la escritura en una de las tantas páginas. "Habla con él de una buena vez. Te esperaremos para que nos reunamos en cuanto te sientas mejor, cuidate Take". El oji azul suspiro y sonrió débilmente volviendo a levantar su mirada chocando con los oscuros ojos de Manjiro, se hizo a un lado dejando libre el paso al interior de la casa -¿Quisieras beber algo, antes de marcharte?- miró como Mikey le dedicó una sonrisa y entro al recibidor de la casa.
Se quitó su calzado y ocupo un par de pantuflas que le ofreció Takemichi. Ambos entraron y Mikey se quedó quieto unos segundos, todo de ahí traía el olor del omega; era simplemente magnífico.
Takemichi se fue hacia la cocina, diciendole a Mikey que tomara asiento en alguno de los sillones de la sala; lleno un vaso con jugo de fruta natural y se la llevo al mayor.
-Hm...- el oji azul estaba con nervios de lo que preguntaría, pero por el momento no se le ocurria nada más para iniciar alguna conversación, sintió la oscura mirada de Manjiro sobre él, lo cual solo le puso más nervioso -M..Mikey-kun... este... tú... ¿Por qué... fuiste a mi escuela? Digo, sino... cómo tendrías las notas de Takuya...-
-Fui a buscarte-
-¿Por qué? Pensé que estabas ocupado con la Touman, Draken-kun me envió un mensaje hace unos días diciendo eso-
