2. Parto y despedidas

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Los dias y noches siguieron pasando, mas rapido de lo que Tao Xian quisiera.

Todas las noches antes de dormir sin falta, le hablaba a su bebe, tratando de hacerle saber que ella le amaba con todo su ser, a la vez que se acostaba al lado de su pequeño a-zhan.

El pequeño apenas tenia un año y medio, no sabia lo que pasaba realmente con su madre, su hermano mayor le decía que tendrían una meimei pero ¿Qué era una meimei?

Madam Lan disfrutaba el tiempo con su hijo mayor, de solo tres años, solo lo podía ver una vez al mes así que lo aprovechaba al máximo.

Al mayor de los niños le gustaba ir a la casa de su mama, aunque no supiera por que no podía vivir con ella.

Le encantaba ver a su hermanito y su meimei que estaba en la gran barriga de su madre, se preguntaba por que no salía, que hacia ahí dentro si afuera estaba el esperándola para jugar los tres juntos.

A veces jugaba con su tía Qi, que ayudaba a su madre con su hermano, era divertida y creaba muchos tipos de juegos.

Por lo que cuando su madre soltó un grito de dolor mientras lo peinaba para luego agarrarse donde esta su meimei, fue directo a avisarle a su tía, que estaba terminando de vestir a su didi.

La mujer le dijo que fuera a buscar a su tío y le dijera que su hermanita ya iba a nacer, que no se preocupara, ella ayudaría a su mami.

Y así lo hizo, fue lo mas rápido que sus cortas piernas le permitían a buscar a su shufu, le pregunto a la primera persona que encontró donde estaba su tío.

El discípulo viendo el estado del futuro líder pensó lo peor, por lo que guio al niño lo mas rapido que pudo donde el maestro Lan, para casi desmayarse cuando escucho que iba a nacer la tercera heredera.

Lan Qiren tranquilizo a su sobrino y lo envio a su habitación, prometiéndole que iría luego de que su meimei naciera para contarle todo.

Mientras tanto, en la cabaña se encontraban un bebe y una mujer llorando por distintas razones.

La mujer lloraba por que sabia lo que pasaría con su bebe, que al igual que sus otros dos hijos no iba a poder criar.

El bebe de un año y medio se encontraba en su cuna llorando tan fuerte como podía al escuchar a su madre llorar, podía sentir de cierta manera su tristeza y no le gustaba.

No sabia que pasaba pero quería que parara, no quería ver a su mama llorar y gritar cosas que el no entendía.

—Bien, mi querida a-xian es hora.—Sonrió Liu Qi a la mujer en labor de parto, tratando de calmarla.— Estas dilatada lo suficiente, la bebe nacerá hoy ¿entiendes?

TaoXian asentía con la cabeza pues no podía hablar por el dolor y la angustia, vio entrar a su cuñado, el cual tan pronto entro salió por ordenes de Qi, se llevo a su pequeño a-zhan.

—xianxian tranquila, todo saldrá bien.—Dijo la partera cuando tenia todo listo —Cuando sientas una nueva contracción tendrás que pujar ¿me escuchaste?

Solo recibió como respuesta un casi inaudible si, para después ver que su hermanita comenzaba a pujar.

Pasaron unos minutos que parecían horas para la mujer en trabajo de parto, para por fin escuchar un llanto, un hermoso llanto que nunca olvidaría.

La partera rápidamente envolvió a la niña y llamo a la otra persona que se encontraba presente.

Ya le había enseñado todo lo que tenia que hacer cuando naciera, como limpiarla, vestirla y detectar si algo andaba mal.

La líder WenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora