Dreaming About Him [L.S]

Carboncillos

El día pintaba soleado o al menos así lo habían dicho en la sección del clima en las noticias. Esa mañana Harry había decidido ir caminando a la escuela porque quería pensar un poco. Y es que volvió a tener un sueño algo extraño acerca de Louis, aunque fue algo corto pudo ver cómo lo tomaba de la mano mientras empezaban a bailar. Después de eso se despertó desorientado otra vez.

Antes de pasar por la puerta de vidrio de la escuela sintió como lo jalaban del hombro e inmediatamente volteó mientras quitaba unos de sus audífonos.

—Ahora entiendo porque no volteabas— susurro Louis con una voz cansada, cómo si hubiera ¿Corrido?

—Disculpa, es que me gusta escuchar música antes de clase— sonrió mientras guardaba ambos audífonos en su mochila.

—Amm yo...— puedo sólo darselos y ya— Bueno...— vamos sólo debo sacarlos de la mochila.

Harry estaba algo confuso con la actitud que había tomado el castaño, mientras Louis sacaba una pequeña caja de su mochila el rizado lo observaba buscando algo en sus brazos, extrañado de no encontrar nada más que su lisa piel.

Cuando el castaño al fin pudo encontrar la pequeña caja la extendió hacia Harry, lo que hizo que aumentara más la confusión.

—Ammm, son para ti. Supuse que tal vez no pasarías a comprarlos hasta después de clases y... tal vez los necesites.

Harry tomó la caja y después de eso Louis desapareció detrás de la puerta con unas mejillas sonrojadas y unos nervios que lo carcomían.

Harry miró directo a la caja que sostenía en su mano y la abrió quitando un poco de papel dejando a la vista unos carboncillos nuevos. Instintivamente sonrió y sonrojó para después dirigirse a su primera clase.

—Recuerden poner la cinta en los restiradores, no pasa nada si el carboncillo ensucia un poco la madera lo limpian después con los trapos, pero si sale del borde de los tres centímetros en el papel tendrán que repetir todo otra vez y...

—Ha...rryyy— un papelito cayó en el restirador del rizado—tsssssss, ¿Seguirás enojado?.

—Depende—recogió el papel que había lanzado Eme y lo desdobló—¿Es en serio?, no puedo tomarte en serio si sigues lanzandome papeles con dibujos de jodidos pe...

—Styles, ¿Podría empezar con el trabajo de la clase de hoy?—Eme solo pudo soltar una carcajada e irse al lugar en donde debía estar desde el principio.

El diseño era libre lo único que la profesora había pedido era que fueran partes del cuerpo. Debían trabajar con los carboncillos, así que el rizado sacó de su mochila el paquete que tenía hace unas semanas pero recordó la caja que Louis le había dado esa mañana. La dejó a lado del papel que ya estaba pegado al restirador y guardó sus antiguos carboncillos. Cuando abrió la caja y sacó tres carboncillos de diferentes tamaños sonrió y supo inmediatamente cuál sería el diseño que haría.

—Lindas manos—Eme se había acercado al rizado.

—Lo son, aunque no sé si debería ponerle los tatuajes—mencionó el rizado haciendo un leve puchero.

—¿Por qué no se los pondrías si era lo que tenías pensado?

—Porque no le ví tatuajes en los brazos y...

—Espera, ¿me estás hablando del chico con el que has soñado? y... fuck espera, estoy procesando—hubo unos minutos con un silencio no incómodo pero lleno de gestos graciosos por parte de Eme.

—¿En serio lo viste, en la vida real?—ella solo abrió la boca y después pareció enfurecerse—¿y por qué no me lo haz dicho?, se supone somos mejores amigos hace años y tú...