⊶9⊷

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- ¿Qué haces?

- Jugar.

- ¿Me dejas?- Seokjin pausó la partida irritado.

- ¿No habías traído una novela?- el viaje no era largo, apenas dos horas, y a Namjoon le gustaba disfrutar el tiempo en silencio. Mas sentía que era un desperdicio estar frente a semejante hombre y no aprovechar.

- Si pero está en una parte emocionante y quiero crear suspense- el alfa era un devorador de libros, leía a una velocidad pasmosa y por eso se obligaba a sí mismo a tomarse pausas con el objetivo de que fuera capaz de saborear los momentos mejor- ¿Ese es RJ?- notó un pequeño llavero saliendo de la gabardina del delta.

- ...Nunca ha ido a Japón- argumentó completamente serio.

- Entiendo, debe estar emocionado- Seokjin se ablandó por su patético intento de conversación.

- Llegaste con tu secretario, ¿son amigos cercanos?- el jefe Kim sonrió por su interés, era demasiado fácil de leer, un golden retriever, definitivamente era un golden retriever.

- Nos conocimos en Daegu y rápidamente nos hicimos amigos, Taehyung es un chico muy cariñoso que cuida a todos como si fuesen su familia, al principio era un desastre en la empresa y estuvieron a punto de despedirlo, saltaba de un lado a otro, se le olvidaban las cosas, hacía muchas tonterías... Por suerte, hablé con el jefe y le dije que si le echaba, yo me iba también, convenciéndolo- ladeó la cabeza recordando esos años.

> Me parecía que tenía potencial, solo necesitaba la motivación suficiente. El señor Bang confió en mi y desde ese entonces Taehyung se convirtió en mi secretario, cambió radicalmente mejorando en su trabajo y nos hicimos aun más cercanos.

- Es una bonita historia- Seokjin no se imaginaba a ese amargado comportándose de manera infantil.

- ¿Y tú? ¿Cómo conseguiste que Min no te amedrentara?- Namjoon se moriría si tuviera que ser su secretario, estaría constantemente en tensión y guardando un miedo atroz a equivocarse.

- Bueno, habían sacado el último modelo de la Wii y necesitaba el dinero por lo que me esforcé al máximo los primeros meses. Min y yo tenemos personalidades parecidas, nos gusta trabajar en silencio, somos directos y decimos las cosas claras. Su omega me contó que sus anteriores empleados siempre intentaban ganarse su favor agasajándole o evitaban su furia mintiéndole a la cara u ocultando las malas noticias. Yo le hablaba honestamente a pesar de correr el riesgo- el delta hacía tiempo que le había perdido el miedo a ese tigre.

> En realidad es un buen jefe, ayer me aseguró que no estaba obligado a venir si me era incómodo y me metió la nueva versión del Animal Crossing en el maletín. Seguro su esposo fue a comprarla ayer al enterarse, conocen mi costumbre de jugar en los vuelos.

- ¿Ellos saben que te atraen los alfas?- la suavidad en los ojos del secretario desapareció- Es decir, puesto que llevan años trabajando juntos...

- Nadie en la empresa lo sabe- se enderezó en su asiento inquieto- Solo mi familia.

- ¿Y tu familia cómo se lo tomó?

- ¿Quieres un consejo? No le preguntes nunca eso a un delta, cariño- frunció la nariz y los labios fingiendo una sonrisa cerrada.

- Lo siento, ¿entonces solo tienes amigos deltas? ¿La gente del club?

- Ese club es para beber sin llevar un jersey de cuello alto o encontrar un alfa con el que pasar mi celo- se instaló un silencio tenso entre ellos- ...Perdón si lo que acabo de decir es excesivamente delta para ti. No tengo amigos en general, los que tenía se fueron cuando descubrieron mi primera marca, estaban aterrados de que les intentara meter mano... Ningún alfa "normal" estaría con un delta que puede llegar a gustar de él, ¿no? Sería arriesgarse a ser tratado como ellos tratan a los omegas.

Namjoon sintió cierta culpabilidad, él era consciente de los sentimientos de su acompañante y no iba a mentir, le gustaba. ¿A quién no le gustaba ser deseado? No le importaba que fuera un delta, no es como si pensara en corresponderle o como si tuviera miedo de que se sobrepasara con él. Lo que jamás pensó fue en alejarse de Seokjin por ese motivo, de verdad quería ser su amigo y descubrir su enamoramiento había fortalecido su confianza para poder acercarse.

- No lo sé, no me importa en lo más mínimo que seas delta, la verdad- colocó una mano en su rodilla y le dio un apretón, las orejas de Seokjin se sonrojaron, el alfa amaba provocar esa reacción- Ahora somos amigos, ¿no? Un amigo que conoce tu secreto y te trata igual que antes.

- Supongo- dijo por lo bajo tímido.

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- Perdón por haberles hecho venir hasta aquí- el jefe de la fábrica les recibió en una centenaria casa del té- Somos muy tradicionales, preferimos hablar cara a cara a nuestros estimados compradores y establecer lazos humanos- el secretario Kim sonrió cínicamente, Namjoon tampoco compró ese motivador discurso. Se sentaron en los cojines sobre los tatamis y una servicial omega les sirvió matcha.

La junta se llevó profesionalmente, el mundo de los negocios trataba del talento de mentir sonriendo y buscar el mayor beneficio no importando en absoluto la ética. El gran jefe, Jung Hoseok, había sido avisado de las condiciones de los mineros en Japón y por eso mismo les había obligado a ir personalmente, pese a que su proveedor le hubiera repetido una y otra vez que no era necesario. El jefe Kim había intentado en varias ocasiones sacar el tema, no obstante, el japonés les hacía una oferta al segundo siguiente desviando su atención.

- Señor Fujiwara, vayamos al grano de una vez- Seokjin dejó grácilmente sobre la mesita de palisandro fotografías de la vida en las minas- El gobierno ya le ha dado dos avisos y cinco meses para arreglar este escándalo que puede salir a la superficie en cualquier momento y salpicarnos, ¿cuándo pensaba decírnoslo?- su voz era serena y modulaba cada palabra de forma tranquila, lo que le hacía ver escalofriantemente parecido a Min Yoongi.

- ¡Juro que estamos trabajando en ello!- el señor Fujiwara hizo una reverencia en el suelo acorralado- ¡En un mes parecerá una mina completamente distinta! ¡Lo juro!

- Cálmese, por favor- el secretario se mantenía imperturbable- La Casita Feliz le dará esos cinco meses de margen puesto que nos ha proporcionado buenos materiales durante años, ¿entiende lo que eso significa?- el calvo asintió frenéticamente.

- ¡Les haré una oferta especial del 35%!- Seokjin dio un golpe a la mesa- ¿40%?- su hermoso rostro estaba congelado en el tiempo, era un témpano de hielo imposible de romper- ¡60%!

- Es un placer hacer negocios con usted, jefe creo que es momento de irnos- Namjoon estaba sin palabras, le dio una última mirada anhelante al bonsái de la estantería y le siguió.

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Secretary Kim, look at me! [Namjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora