⊶10⊷

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- No se que habría hecho sin ti- Namjoon abrió los ojos sorprendido.

- Literalmente no hice nada, estuviste increíble ahí- Seokjin negó caminando a su lado.

- Estuve toda la reunión ensayando esas palabras en japonés, me diste tiempo. Y cerraste impecablemente los acuerdos sobre los lotes y la cantidad de metal, hacías las cuentas como una calculadora humana, ese hombre estaba impresionado.

- Tu fuiste el héroe de hoy, te invitaré a comer en honor a tu aura de alfa intimidante, tu lobo realmente se mostró, ese alfa n- el delta se lanzó a sus brazos dando un grito asustado- ¡¿Qué pasa?!

- ¡Una paloma! ¡Ha pasado justo a mi lado!- movió las manos en el aire todavía espantado- Creo que un ala me rozó la cabeza- sacó un espejito rosa de su maletín de oficina y revisó que su cabello estuviera bien- Debió ver mi cara y de la belleza se distrajo- lo cerró satisfecho y se giró en su dirección- ¿Me invitas a tarta? Me encantan los dulces, te dejaré llamarme hyung porque te voy a vaciar la cartera.

Bueno, Namjoon no era un experto, ¿pero las personas se portaban así frente a su enamorado? Su secretario a veces era estrafalario, otras asustadizo, otras desvergonzado. Se veía tan tranquilo en la empresa... y en realidad era un mocoso presumido de cinco años.

- Eres demasiado infantil.

- Es mi secreto para mantener mi cutis firme- se acarició la afeitada mejilla libre de las más mínimas imperfecciones.

- He visto una cafetería rosa a unas calles de aquí, vayamos a esa- ignoró sus palabras que en el fondo le hicieron reír.

- ¿No te molesta que te vean en un lugar así? Por experiencia debe ser una cafetería de omegas adolescentes- el alfa rodó los ojos.

- Estamos yendo por ti, iremos a los sitios que te gusten a ti- su ahora hyung paseó tarareando canciones de Twice- ¿Siempre te pones así de feliz cuando te invitan a comer?

- Por supuesto que sí, amo comer y hoy será gratis. Estoy en un país bonito, he hecho mi trabajo y por primera vez estoy con un compañero de oficina con el que no tengo que fingir por miedo a que sepa que soy un delta- siguió su camino murmurando, no percatándose de la mirada triste de Namjoon. Se retractaba, le encantaba esta personalidad, le encantaba Seokjin. Como amigo.

- Mira, cerca de ese templo hay muchos puestos- colocó un brazo por encima de sus hombros, manteniéndose a su lado durante toda la tarde y noche que estuvieron probando cada tienda de comida callejera.

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- ¿Cómo que no va a venir?- Jimin agarró el teléfono de su esposo y llamó inmediatamente a la casa de su amigo- ¿¡Hyung te estás muriendo!?

- ...Ah, solo tiene un poco de fiebre- respondió una voz más grave de lo usual- Ayer no se abrigó adecuadamente y pescó un resfriado de otoño porque estuvo hasta tarde en la calle, al volver esta mañana a Corea se sintió peor, por eso no irá a trabajar.

- ...¿Señor Kim?- al omega no le hizo gracia que respondiera la llamada un desconocido- ¿No se está tomando muchas libertades usando el teléfono de otra persona?- Yoongi bufó de la hipocresía. ¡Yo soy tu omega! ¡Cállate! Vocalizó en silencio- ¡¿Qué hace en su casa?! No deja que nadie vaya, ¿le has obligado?

- Señor Min- habló el delta- El jefe Kim me ayudó puesto que me encontraba muy mareado, estoy mejorando, le veo mañana. Gracias por su preocupación, significa mucho para mí.

- ¡Espera! ¡Puedo ir y prepararte un caldo! ¡Llevaré medicinas!- su marido empezó a recoger los papeles, haciendo una lista mental de lo que debían comprar en la farmacia.

- ¡No! ¡No es nada!- el secretario no había levantando en ningún momento la prohibición de que nadie podía entrar a su apartamento- ¡Le veré mañana, que tenga un buen día! ¡Adiós!- Jimin pucheró.

- ¡Rebecca!- en el hogar del enfermo Namjoon se divertía con el pez altavoz- ¡Pon la quinta canción que más escucho!- el pez movió la boca mecánicamente.

- Toxic de Britney Spears sonando- Seokjin se hundió en las mantas de la cama, un cojín de pelo rosa presionando contra su cara.

- ¡Vete de mi casa ya! ¡Rebecca para la música!- las cortinas estaban corridas haciendo que el cuarto estuviera en penumbra, pero seguía viendo los rasgos de ese alfa y el como le sonría burlón- ¡Fuera!

- No puedo dejarte solo, te ves fatal- un pañuelo usado voló a su cara- ¡Hyung!

- ¡Me has llamado feo!- el jefe Kim no podía evitarlo, verlo quejoso y todo sonrojado, usando una voz nasal... le daba demasiada ternura.

- ¡No te he llamado feo!- se subió a la cama e inmovilizó sus brazos antes de que llegara otro ataque- ¡Eres World Wide Handsome!

- ¡No sé inglés!

- ¡Eres el alfa más atractivo que he visto en mi vida!

- ¿Interrumpo algo?- los dos se quedaron congelados en el lugar parando el juego.

- Dijiste que vivías solo- le susurró el alfa temiendo darse la vuelta y ver un fantasma o a un asesino serial.

- Vivo solo- Seokjin estaba aun más asustado.

- ¡Se os oye desde aquí!- se encendieron las luces artificiales y el chico desconocido pasó de ser una aterradora sombra a un lindo omega.

- ¿¡Jungkook!?- el delta se enderezó golpeando su cabeza con la del alfa- Auch. ¿Qué haces aquí? ¿Mis tíos lo saben?

- ¡Me he mudado!- levantó la llave que había utilizado para entrar hace apenas unos segundos- Le enseñé a tu vecina fotos nuestras y me dio la llave de emergencia- la hipersaturación de información provocó que el secretario cayera débil a un lado, siendo un lado el pecho de Namjoon, todavía en la cama.

- ¿Te encuentras bien?- su amigo le tocó la frente perlada de sudor y roja por el golpe.

- ¿Está enfermo?- Jungkook ladeó la cabeza confundido- ¿No se lo estaban montando hace un momento?- se sentó en el colchón y abrió los primeros botones del pijama dejando que el aire le enfriara- Tranquilo hyung, tu primo cuidará de ti- varias marcas de mordiscos brillaron bajo la luz provocando inevitablemente un efecto en los dos invitados- Te he echado de menos, hyung.

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Rebecca:

Rebecca:

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Secretary Kim, look at me! [Namjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora