Érase unas gaseosas

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Himiko estaba sentada en una banqueta al lado de la maquina expendedora, a su costado yacía su acompañante, quien luego de haberse desmayado en el pavimento , tuvo que cargar (con dificultad debido a que él pesaba más que la maga definitiva) , sentándolo a su lado, con cuidado sujetando su brazo para que este no se cayera de donde estaba sentado.

" Debí haber pedido un taxi, así me ahorraba este problema " Dijo para luego soltar un pesado suspiro

" Me dio sed " Pensó ella, al instante volteó hacia la máquina expendedora, la cual estaba a unos pasos de ella 

" Si lo dejo durmiendo podría ir por algo de panta " 

Ella con sumo cuidado sostuvo la cabeza del chico uva para apoyarlo en una de las cajas de regalo

" Bien, esa será tu almohada mientras tanto" 

Ella se acercó a la maquina expendedora , sacó su monedero y metió un billete de 200 llenes, para sacar su preciada bebida. La lata cayó soltando un sonido a chocar con la bandeja, rápidamente Himiko la sacó, la miró con algo de felicidad y procedió a abrirla para dar un largo sorbo.

"Ahh~" 

Después de haberse ya hidratado volvió a la banqueta, y ahora el problema  era como hacer regresar a Kokichi a la posición en la que estaba, debido a que ahora ocupaba toda la banca

" Mmmm, ya sé " Pensó la pelirroja

Con delicadeza lo levantó desde su brazo para volver a la posición en la que estaba, pero este resbaló de su mano, haciendo que este se dejara caer en los muslos de Himiko.

" Nyeh! " 

Los ojos del chico uva se abrieron en plena escena, empezaron a ver a todos lados, y luego se clavaron el Himiko quien estaba algo avergonzada.

" ¿ Qué tratabas de hacerme Himiko-chan ? "

" Bueno, no quería despertarte , podría ser malo hacerte hacer sobresfuerzo " 

" Jaaaaa? ~  Ya veo " 

El chico uva quien aún estaba en la misma posición giró para el lado opuesto donde estaba recostado

" ¿ Qué haces ? ¡ Levántate, mis piernas no son almohadas  ! " 

Este solo tendió a sonreírle mientras la observaba, Himiko le dio golpecitos en su espalda, que no dolían para nada a Kokichi, ya que los golpes de la maga definitiva eran igual de fuertes que las patas de un gatito

El peli morado se levantó de las piernas de ella por fin,  estirando sus brazos poco a poco

" ¿ Y ese milagro que no te tuve que rogar ? "

" Es que me cansé de recostar mi cabeza en tus piernas, son duras como  rocas "

Este soltó una leve risa, molestando un poco a Himiko, quien rápidamente lo olvidó reemplazándolo con un sorbo de su bebida

" Parece que te me has adelantado comprando Panta , bien, mi turno "

" Con cuidado y no hagas mucho esfuerzo " 

" Sisi, ya aprendí, lo haré despacio para no hacer que mi cabeza tenga un colapso " 

Dijo sonriendo, se levantó de la banqueta y emprendió la caminata hacia la maquina expendedora

" Muy bien, aquí vamos " 

De su billetera saco un billete , lo acercó a la maquina y ...

" Eh? "

" ¿ Qué pasa ? " 

El volteó  hacia ella mostrando el billete que iba a meter

" No me alcanza " 

Luego de esa fiesta (Oumeno Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora