𝘔𝘢𝘯𝘪𝘢𝘵𝘪𝘤 | Silco (Arcane)

24

*Narra Silco*

La Situación en el negocio me mantenía completamente estresado, todo se estaba complicando a mi alrededor.
Los cargamentos de brillo se habían retrasado por culpa de los los firelighers, Hilda no estaba haciendo su trabajo bien cuando la dejé a cargo de estos.
Estábamos perdiendo varios contratos gracias a la mala fama que Finn estaba dando a mis aliados sobre mi forma de llevar el negocio.
Este hijo de perra me lo va a pagar y no le iba a salir nada barato.

Estaba leyendo la cancelación de los contratos, eran bastantes; había pasado una noche fantástica y ahora estaba sucediendo esta mierda.

Mis pensamientos fueron interrumpidos al escuchar tres golpes de la puerta, pidiendo permiso para dejar pasar a alguien, la puerta se abrió dejando ver a Sevika detrás de ella.

—Señor, creo que debería ver esto—

Me paré de mi asiento y seguí a Sevika bajando las escaleras que iban hacia el bar.

*Narra T/N*

Estaba conversando con alguno de los matones, intentando resolver problemas que podían perjudicarle a Silco, notaba que las cosas se estaban poniendo muy mal.

"Vaya, miren quien es, esta dulzura me voy a comer más tarde"

Volteé a ver a Finn, me acerqué a él.

"Si no es que antes Silco te corta la garganta primero" -Suelto yo.

Renni se le pone al lado de Finn, una especie inhumana, era aliada de Silco hasta que Finn le metió ideas a la cabeza.

"Deberías estar en nuestro equipo preciosa, y no aquí, limpiando su mierda" -Dice Finn

"Prefiero podrirme en las minas de donde vinieron, antes de unirme a ustedes" -lo miro a los ojos.

Finn mira mi cuerpo de arriba hacia abajo con una sonrisa, me daba asco como me veía, el único que podía verme así era Silco.
Renni se pone frente a mi.

"Venimos a hablar con Silco, no con su perra"

Mi sangre hirvió al escuchar que Renni me dijo perra.
Esta se volteó caminando hacia las escaleras.
Vi una copa de vidrio, la tomé y la rompí, tomé un pedazo de vidrio largo, me acerqué a ella por la espalda y la tomé del cabello haciéndola hacia atrás.
Puse el pedazo de vidrio en su cuello, a nada de cortarle las venas del cuello y dejarla morir desangrada.

"A quien le dices perra, zorra de mierda" -dije yo

Intentaba zafarse pero no podía.
Hay un silencio completo en el bar y ahora entendía porqué.
Sevika y Silco venían bajando las escaleras.
Silco se sorprendió al ver lo que estaba a punto de hacer, Todos volteamos.

"Ustedes 3 suban" -habla Silco.

Suelto a Renni, dejo que Finn y ella suban antes que yo, para que no intenten huir.

Las demás personas continúan trabajando.
Llegamos a la oficina, Finn toma asiento frente a el escritorio, Renni se mantenía parada.
Sevika y yo nos poníamos detrás de Silco, mientras que él estaba en el escritorio a punto de hablar.