Capítulo II.

49 13 6
                                    

Suena el timbre y mis nervios se hacen lucir, pues conocer a personas nuevas no es mi fuerte.

Mi mamá si dirige a la entrada para abrir la puerta, yo mientras estoy en el sofá de la sala mirando mis redes sociales para calmarme un poco, me levanto cuando escucho a mi madre llamarme.

-Hija ven. Te presento a mi amiga Julia, Julia ella es mi pequeña Auna.

-Mucho gusto señora Julia.- Digo tratando de sonar lo más natural posible.

-El gusto es mío Auna, que hermosa eres, tú mamá me ha hablado mucho de ti.- Dice la mujer, pero de algo me doy cuenta y es que a según mi mamá ella vendría con su hijo y no veo ningún rastro de este, hasta que la señora Julia lo llama.- Adam ven.

Se acerca el chico quien se llama Adam, me quedo observándolo por un momento y él hace lo mismo, me escanea de pies a cabeza acto que me incómoda.

Debo admitir que es atractivo, cabello de rulos pero lacio a la vez, ojos profundamente negros, pestañas largas, su piel es extremadamente pálida, sus labios rosados, como si llevara labial, pero está claro que son naturales, de contextura delgada al igual que su madre, y lleva consigo un atuendo monocromático, camisa y pantalón negros al igual los zapatos. En cuanto dejamos de mirarnos se atreve a hablar

-Hola, buenas noches.- Se limita a decir con una voz neutra.

-Buenas noches. - Es lo que logro formular, pues si no tiene más nada que decir, yo menos.

Luego de tan buenas presentaciones nos dirigimos todos al comedor. Mi papá y mi hermano Jacob ya se encuentran en la mesa, mi mamá se sienta al frente de mi papá, Adam al lado mío y Julia queda al frente de Jacob. Cabe destacar que ya la comida estaba servida.

-Julia, me dijiste que te hospedaste en el centro de la ciudad, ¿ya tienes arreglado lo de la escuela de Adam?.- Habla mi mamá.

-Claro amiga, fue lo primero que hice al llegar aquí, lo inscribí el la preparatoria que me recomendaste, donde supongo está Auna.

-¡Que bueno amiga!, así mi Auna lo puede ayudar en lo que necesite.- Claro mi mamá siempre poniéndome a la disposición de sus amigas sin mi consentimiento.

-Me parece bien, claro, si Auna no tiene ningún inconveniente.- Es más que obvio que no podía negarme.

-No tengo ningún problema.- Digo con una sonrisa forzada.

Me quedé mirando a Adam por un momento y tiene un gesto de incomodidad, creo que no le agrado, y pues agradarle no me interesa, a mí tampoco me agrada mucho que digamos.

Julia y Adam se estaban comunicando algo con la mirada lo que no pude descifrar.

-Auna es una buena estudiante, está al tanto de todo, así que Adam se adaptará lo más pronto posible a sus clases, ya lo verás. - Le dice mi mamá a Julia.

-Si estoy segura de eso. Adam también es un buen estudiante, aunque a veces sus impulsos se adueñan de él pero lo logra controlar. - "Impulsivo", el chico es Impulsivo, que interesante.

Cambiaron la conversación a lo que mi papá y mi hermano se incluyeron más, pues creo que lo asocial lo saqué de mi papá y Jacob, bueno, simplemente es Jacob.

No soy incluida en su conversación y decido ir al sofá de nuevo -mi aposento- y bueno, reviso un mensaje de mi mejor amiga.

-Auna cariño, ¿puedo ir mañana a tu casa?

-Claro que puedes, avísame la hora para estar pendiente.

-A las 3:30pm, ¿está bien?

-Si, me parece bien.

-Bueno, perfecto, nos vemos mañana, te quiero.

Amo que Trixie me visite, es la mejor haciéndome pasar un buen rato en mi casa y siempre hacemos una que otra cosa para divertirnos. Desde chiquitas sabemos como pasarla bien y siempre ha estado para mí en mis mejore y peores momentos, jamás cambiaría a mi amiga por nadie en el mundo.

-¿Puedo tomar asiento?- Esa voz neutra que conocí hace unos minutos llega a mí, sin menos esperarmelo, claro que sin yo acceder él tomó asiento. Que simpático.

No me mira, sólo está concentrado en su celular, y pues no pienso hablarle sin que él lo haga primero.

-¿Eres así siempre con tus invitados?- Me pregunta.

-¿Así cómo?

-Así de odiosa, antipática, eso es algo muy grosero viniendo de unas de las anfitrionas de la casa.- ¿Qué le sucede a este sujeto? ¿Cree que puede darme lecciones de cómo atender a unos invitados luego de que él fue igual de antipático que yo?.

-Pues sí, lo soy siempre, ¿te molesta?

-Para nada, pero me da la impresión de que no te caí bien y eso es algo muy problemático puesto que tendrás que ayudarme a adaptarme a la escuela. - Hace énfasis en "Adaptarme" refiriéndose a lo que dijo mi mamá hace unos minutos.

-Bueno, tendrás que adaptarte también a mi comportamiento, así soy.- Como me molesta este chico, lo conocí hace como 30 minutos y ya me hizo perder la paciencia.

-Bien.- Dijo con desinterés.

Al fin y al cabo, la señora y su hijo deciden irse a su hogar, cosa que me alegra, y no por Julia quien si me agradó, sino por su patético hijo.

-Adiós Auna fue un placer conocerte. - Me dice Julia.

-Igualmente señora Julia.

Veo a Adam caminar al lado de su mamá, y lo que menos esperé fue una despedida de Adam y sucedió.

-Adiós Auna, diría que fue un gusto conocerte pero la verdad, fue desagradable, me esperaba algo mejor de ti en lo que te vi.- Me quedo con la palabra en la boca, no me dejó hablar el muy cretino, me dio la espalda, y así dice que soy yo la grosera. Que desagradable chico.

Luna nuevaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora