Disclaimer: Los personajes de Saint Seiya y Frozen no me pertenecen, son propiedad de Mazami Kurumada y Disney, esta es una obra de ficción únicamente con fines de entretenimiento.
Esta idea estuvo dandome vueltas en la cabeza desde hace tiempo, asi...
Disclaimer: Los personajes de Saint Seiya y Frozen no me pertenecen, son propiedad de Mazami Kurumada y Walt Disney Animation Studios, esta es una obra de ficción únicamente con fines de entretenimiento.
En el bosque Encantado
Los gigantes están lanzando piedras a la presa, el espíritu del agua salta de un lado a otro agitando las aguas detrás de la presa, que empieza a ceder ante todo esto.
-¡Todos alejense, rápido! - Gritó el teniente Matias a sus hombres
- ¡Vayan a las tierras altas, alejense del cauce del río! - indica Yelena
Northuldras y soldados se quitaron del camino y ven caer la presa, saben que el agua acabará con todo a su paso rumbo a Arendelle.
-Reina Elsa, confío en usted - dice el teniente.
En Arendelle
A la orilla del castillo, junto al agua, vistiendo en una imponente armadura de oro, se encuentra un hombre, quien comparte parte del pasado de Elsa, le dicen el Mago del Agua y del Hielo, el último Caballero de Cristal, es el Caballero Dorado, Camus de Acuario.
La ola gigante pasa los riscos y se acerca a Arendelle.
Camus la observa, el viento agita su capa y cabello pero él se mantiene firme, es como si esperara que la olla llegara a cierta distancia, los aldeanos lo observan, y ven un resplandor dorado emanando de él, el acuariano pone sus brazos sobre su cabeza formando la imagen de un cántaro con agua, la ola se acerca, todos están atentos a lo que ocurre, de repente, al mismo tiempo que baja los brazos grita
-¡EJECUCION AURORA!
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De sus manos sale una corriente de aire frío, que al golpear el agua la congela instantáneamente, convirtiéndola en un muro de hielo, el agua que viene atrás se congela al tocarlo, nada pasa a través de esa pared helada.
Todos están sorprendidos con lo que pasó, una vez que la corriente de agua se calma, Camus hace un gesto levantando el brazo y el infranqueable muro de hielo se rompe, los trozos de hielo de evaporan al contacto con el agua, dejando el fiordo en calma.
Los aldeanos vitorean al acuariano, Anna, Elsa y Olaf se emocionan al ver lo que ocurrió
Anna -¡Lo logró, detuvo el agua.!
Olaf -¡Viva viva viva!
Elsa -Si ... muchas gracias ..Maestro ...
Elsa se desvanece momentáneamente, Anna siente el repentino peso de su hermana y con ayuda de Olaf la lleva junto a un árbol para que descanse.
En Arendelle
Camus mira las tranquilas aguas del Fiordo, y dice para sí
-Faltó muy poco, pero esto aún no termina, Elsa, ¿Dónde estás?
Cierra los ojos, trata de buscar a Elsa, como quien busca un ruido lejano, o un brisa ligera en el bosque, no con los ojos, sino con los demás sentidos, está buscando la "presencia" de Elsa, de repente, abre los ojos y voltea rumbo al camino del Norte, al lugar donde hace poco estaban Elsa, Anna y Olaf
-¡Te encontré!
el brillo dorado vuelve a cubrirlo, da un salto y desaparece.
En el camino del Norte
-Descuida Elsa, una vez leí un libro de qué hacer en accidentes - Anna empieza a sacar cosas de su mochila, vendas, agua, pañuelos, pero está asustada de ver las heridas de su hermana.
-Necesitaremos unas ramas para...- mira una de las que cayeron con el terremoto - esta servirá, solo debo ... - dice esforzándose por quitar los pequeños brotes que le estorbaran -..quitar.. esto...
-Permíteme - le interrumpe una voz y una mano con guantelete dorado toma la rama
Anna se asusta, suelta la rama y retrocede, Con unos movimientos rápidos de su mano, Camus corta los excesos y la parte en 2, después se acerca a Elsa y se arrodilla frente a ella
-Déjame ver esa herida...dice mientras quita con cuidado la bota, hay una gran mancha de sangre en la pierna y un pequeño charco se forma en el piso.
-Maestro Camus, que alegría verlo... ggggnnnn- el dolor la interrumpe
Camus examina la herida con cuidado
-Tu pierna está fracturada, necesito volver a colocar el hueso en su lugar antes de vendarla y entablillar, contigo no funcionara tratar de usar frío para entumecerla, lo siento Elsa, esto dolerá...
Elsa asiente, pero su rostro refleja miedo a las palabras de su Maestro.
Camus examina cuidadosamente la posición del hueso, sujeta la pierna, calculando la dirección y fuerza que va a necesitar, debe hacerlo rápido y en un solo intento, no quiere lastimar más a su otrora alumna, un preciso y rápido movimiento acompañado de un crujido y el hueso está en su lugar de nuevo
-UUUUHHHGGGNNNN- Elsa da un grito ahogado apretando los dientes
Camus empieza a limpiar y vendar la herida.
Anna reacciona la oir a su hermana y va hacia ellos
-¡Oiga! deje en paz a mi herma...
-¡Sostén esto! - la orden interrumpe a Anna, que de inmediato se arrodilló y sostuvo las ramas mientras Camus vendaba la pierna.
-Ahora veamos ese brazo - dice mientras rompe la manga del abrigo de Elsa, nota un herida que sangra, inflamación, por suerte, el hueso no está del todo roto y sigue en su lugar
-Tu brazo solo se fisuro, el hueso sigue en su lugar, hay que limpiarlo, vendarlo y te pondré un cabestrillo - dice mientras procede con las curaciones..
-Con esto basta por ahora, pero debemos llevarla al castillo para que el médico real la revise.
De repente, Camus se endereza, como si presintiera algo, voltea ligeramente hacia atrás y se levanta en dirección al camino del Norte, Anna no sabe que pasa, pero le dice a su hermana que todo estará bien, Olaf trata de darle animos a Elsa, en eso se escucha el sonido de cascos golpeando el piso y a Kristof gritando
-¡Anna, Elsa, Olaf!
-¡Alto! - grita Camus al tiempo que levanta la mano ordenandoles que paren
Sven se frena ante la presencia del Acuariano, Kristof baja de la carreta, pero al igual que Sven, no se mueve, la mirada helada del caballero los paraliza.
-Necesitamos tu reno y tu carreta para llevar a la Reina y a la Princesa al castillo
-¡Kristof! - grita Anna corriendo hacia el - Elsa está herida, necesita un médico, hay que llevarla al castillo.
Kristof reacciona - ¿Que?,¿ Elsa? ¿herida? - ve a Elsa en el suelo- Si, enseguida, hay que subirla a la carreta.
-Bien - dice Camus con calma y se dirige hacia Elsa, se arrodilla junto a ella y la levanta con cuidado, Elsa sabe lo fuerte que es su antiguo Maestro, se siente segura.
Camus recuesta a Elsa en la carreta, todos se acercan y Elsa ve cómo todos están ahí protegiéndola
-Todo saldrá bien, te llevaremos al castillo - dice Anna
