Legado deshecho

Capitulo 7

Ella no le dijo su nombre.

Le había tomado casi cinco minutos obtener más que un 'Vuelve a dormir, Uzumaki-san'.

La conversación fue corta, cortante, un poco incómoda y un poco divertida desde su perspectiva.

Supuso que debería haber esperado eso, probablemente todavía estaba aturdida por el hecho de que él la había encontrado.

Pero aun así ... ella no le dio su nombre ...

Así que simplemente la llamó An-chan.

Casi había hecho que Kakashi se cayera de su árbol cuando lo llamó Bu-san al día siguiente.

O los dos estaban demasiado avergonzados para decir que los habían atrapado, o Jiji había decidido adoptar un enfoque de esperar y ver con respecto a este pequeño desarrollo.

Sin embargo, Kakashi aún podía esconderse de él con un poco más de esfuerzo. Lo hizo al día siguiente. Él era lo suficientemente bueno. Sin embargo, An-chan siempre había expuesto solo un poco de su chakra. Lo suficiente para que él capte su señal.

Aún así, esto animó un poco sus días. Durante casi la última semana todos los días salía a entrenar, y ahora tenía la capacidad plena y desenfrenada de pedirle consejo a Kakashi cada vez que lo encontraba. Lo que sucedía cuando Kakashi no quería esforzarse al máximo por esconderse bien.

Entonces, con el Anbu, sin tener órdenes de hacer lo contrario, y sin ser lo suficientemente grande como para ignorarlo por completo (sin que su libro ayudara en este último bit), a regañadientes le dio un pequeño consejo e incluso le mostró los conceptos básicos de un chakra Anbu. ejercicio de control cuando notó que eso era en lo que Naruto estaba trabajando principalmente.

Luego, por la noche, cuando llegaba a casa, preparaba la cena para él y An-chan, algo que consistía principalmente en ramen. Todo el tiempo hablaba con ella, con la esperanza de obtener una palabra de respuesta, pero sobre todo hablando con ella mientras ella se quedaba allí.

Ella nunca comió un bocado de la comida mientras él estaba despierto, pero siempre se había ido cuando él se despertaba. Esperaba que ella no lo estuviera tirando.

Esta noche era la última noche antes de las asignaciones del equipo y prácticamente rebotaba contra las paredes ensangrentadas. Solo un día más y volvería a ser un gennin, el primer paso estaría terminado.

Terminó de ducharse secándose antes de vestirse y salir del baño. Tenía cinco años ahora, así que solo un año más antes de que ya no necesitara usar esa cosa.

Sintió que Kakashi se iba y llegaba An-chan.

"¡An-chan!" Llamó sonriendo. La mujer ya ni siquiera fingió ser sigilosa, y entró por la puerta principal, a juzgar por el sonido.

Salió del baño y salió al pasillo donde encontró, para su sorpresa, la mesa del comedor cubierta con varias bolsas llenas de comida.

"¿No puedes seguir comiendo Ramen todos los días?" El acento llano hizo que sus ojos se posaran en ella, parada en un rincón a la mitad de la habitación, envuelta en una capa de la cabeza a los pies como si nunca se hubiera movido. Fue impresionante considerando que toda su mesa estaba llena de cosas.

"¡Oh, vamos, hago un buen ramen!"

"Ya no lo haces." Ella respondió en un tono, en todos los sentidos, completamente impasible. Pero Naruto reconoció la satisfacción engreída a una milla de distancia y sus sentidos de peligro hormigueaban.

Parpadeó, confundido por un segundo antes de palidecer, saliendo corriendo de la habitación hacia la cocina.

Fue un momento después cuando medio barrio despertó con su angustiado grito de desesperación.