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¿Por qué aceptó la invitación? ¿Y si mejor se quedaba? Comenzó a caminar por toda su habitación realmente nervioso, ¿qué es lo que haría allá? ¿Quedarse en una esquina viendo como todos se divertían? Ah, que horrible, ya no quería nada

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¿Por qué aceptó la invitación? ¿Y si mejor se quedaba? Comenzó a caminar por toda su habitación realmente nervioso, ¿qué es lo que haría allá? ¿Quedarse en una esquina viendo como todos se divertían? Ah, que horrible, ya no quería nada.

Se sobresaltó cuando su teléfono comenzó a sonar, se acercó viendo que era GiHyeok.

- No quiero contestar... - Murmuró tomando irónicamente teléfono para contestar - Hola...

- ¿Ya vienes? - Se oía música y risas - ¿Vas a venir, verdad?

- Eh... si... ¿No te lo dije? - Trató de sonreír pero sólo escapó una mueca, quería que la tierra lo tragara.

- Dale, te estamos esperando. - Y colgó.

MoonJo suspiró, un suspiro largo y algo pesado, se dejó caer en su cama, una noche, sólo era una noche, debía aprender a socializar, la soledad ya comenzaba a abrumarlo, comenzaba a sentirse mal.

¿Qué pasaba si se burlaban de él?

- ¡Ay, ya no soy un niño para preocuparme de eso! - Se sentó de golpe - ¡Vas a ir a esa fiesta y harás muchos amigos! - Se dijo a sí mismo.

Se quedó un rato así, hasta que volvió a recostarse.

- Mejor estudio.... ¿Teníamos otro examen la semana que viene? ¿De qué sirven las fiestas? - Lloriqueó.

"Perfecto, entonces te veré allí."

Volvió a sentarse, ese chico estaría ahí para verlo, para hablar, ¿si no iba, se quedaría solo? ¿Qué pasa si alguien reconocía lo del post y se burlaban todos de él? Negó con la cabeza y se levantó para darse un baño.

Luego estaba eligiendo su ropa, ropa cómoda y holgada, trató de ponerse una chaqueta sin mangas, ¿así se vería más cool? Se miró al espejo.

- ¿Estoy guapo? - Frunció sus labios.

Su mirada se fijó en ese punto en especial en el reflejo del espejo, y luego bajó su mirada a sus muñecas, las marcas eran demasiado notorias, no quería que alguien comenzará a preguntar. Se quitó la chaqueta y decidió ponerse un suéter encima de su camisa, estaría más cómodo con esa ropa.

Suspiró y salió de la casa decidido, no quería conducir, además, para ser sincero no confiaba mucho en sus compañeros, la última vez rompieron las ventanas del auto de uno de sus compañeros, y el auto era de su padre, jamás volvió a clases.

Así que decidió tomar el autobús.

Al bajar, miró su teléfono y siguió la dirección, hasta llegar a la enorme casa de GiHyeok, iba a golpear la puerta pero la abrieron antes que él.

- ¡Ya estás aquí! ¡Hola! - GiHyeok sonrió - ¡Pasa!

Entró sin decir nada y GiHyeok tomó su brazo apagándose a él mientras avanzaban. Estaba lleno de gente, conocía a algunos, suponía que los demás eran de la facultad de artes, su mirada se posó en el chico de la laguna, quien parecía que también lo había visto y comenzaba a hacer señas, parecía que lo estaba llamando, iba a soltarse del agarre de GiHyeok, pero este parecía estar aferrado con fuerza a él.

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