𝗦𝗮𝘃𝗲 𝗠𝗲 [𝐌𝐢𝐤𝐞𝐲 𝐗 𝐌𝐚𝐥𝐞 𝐑𝐞𝐚𝐝𝐞𝐫]

十六

__ Emma ¿Esto es necesario?_ cuestionó Hikaru, viendo a la rubia por el espejo de la habitación de esta misma.

Emma siguió buscando un kimono adecuado para su mejor amigo, ignorando la pregunta de este.

__ No es necesario arreglarme tanto, soy un chico ¿Lo recuerdas?

En unas horas sería año nuevo y Emma se encontraba arreglando a su querido amigo para este día.

__ Claro que lo se, pero hoy es año nuevo y no dejare que te pongas lo primero que agarres, Mitsuya estaría decepcionado de tí_ habló Emma, terminando el peinado del ojiceleste y tomando una pequeña pulsera con un dije de estetoscopio.

__ Tengo un regalo para ti, cierra los ojos y estira tu muñeca_ susurró Emma con entusiasmo.

Hikaru siguió sus órdenes, luego sintió como algo frío se instalaba en su muñeca.

__ Abre los ojos.

El pelinegro abrió sus ojos, mirando aquella pulsera plateada, le quedaba perfecta.

__ Gracias Emma_ murmuró Hikaru con la voz rota, abrazando a la rubia.

El pelinegro no se consideraba una persona sensible, pero ahora cada mínima muestra de afecto hacia que lágrimas salieran de sus mejillas.

Nadie podía culparlo.

No habían pasado ni siquiera cuatro meses desde la perdida de su hermano, el cual recordaba día a día, cada vez que iba al baño y veía su reflejo en el espejo.

Eran muy parecidos, después de todo.

__ Creo que este te quedará muy bien_ habló Emma, tomando un Kimono negro con pequeñas partes celestes.

Luego lo tiró sin una pisca de delicadeza al baño.

__ Listo_ habló el pelinegro cuando terminó, salió del baño con la cabeza gacha por la vergüenza.

__ ¡Te vez genial! Es elegante, pero no aburrido y desprende un aura de misterio_ chilló Emma alegre.

Hikaru se acercó lentamente a la cama de la rubia para tomar el libro que Mikey le regaló para navidad.

__ Hikaru, no puedes ir con tú libro_ regañó Emma, cruzando sus brazos.

__ Pero aún no lo termino de leer_ se quejó el pelinegro haciendo un leve puchero.

Pero una sola mirada de la rubia hizo que Hikaru dejará de insistir.

Luego unos pequeños toques se escucharon en la puerta de la habitación de Emma.

__ Emma, Kenchin ya llegó. Apúrense antes que se llene_ dijo Mikey detrás de la puerta.

__Ya vamos_ informó Emma.

__ Los esperaré a ambos afuera_ habló Mikey, para luego retirarse del lugar.

__ Nunca he ido tan arreglado, podría decirse que es la primera vez que voy con un Kimono tan bonito_ murmuró el ojiceleste.