2. intento número dos

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Al día siguiente,Jungkook vuelve a la casa de Hyori. Esta vez,no viste ese traje,sino algo más cómodo. Unos jeans negros y una sudadera del mismo color,colocó la gorra de la sudadera sobre su cabeza,cubriéndola.

En sus manos carga un pote lleno de helado,se dijo a sí mismo que con lo que llevó el día anterior era una forma honesta de demostrar sus sentimientos y sus buenas intenciones,sin embargo aún teniendo demasiadas ideas de regalos,él no pensaba comprar la aceptación de su suegro,quería ganárselo.

Así que,¿qué mejor manera que esta?. Una linda conversación comiendo algo que nadie podría resistirse; helado.

Y por supuesto, a él.

Sube las escaleras confiado,ayer había resultado muy bien a su parecer y hoy no sería la excepción. Una vez se encuentra frente a la puerta,toca con su típica forma y al instante la puerta se abre,el sonríe.

— ¿Cielo?.— se sobresalta al escuchar la voz de Hyori, su novia.

¿Qué ella no estaría en estos momentos haciendo una pijamada con sus amigas?

— ¿Amor?,¿Qué haces aquí?.— Jungkook muestra su gran confusión y a la vez,desesperación.

Él aún no había hablado de esta situación con ella,al menos no completamente,pues ambos ya habían conversado sobre sus planes de casarse,así que sin siquiera tener que preguntar nuevamente, ya sabía la respuesta.
Sin embargo,no tuvo la oportunidad de mencionarle que prácticamente estaba hostigando a su padre hasta que  lo escuche y finalmente se dé la oportunidad de conocerlo para que acepte de una vez por toda lo adorable que es.

Conocía a Hyori,por más de que amaba con el alma a sus padres,no dejaría que la opinión de ellos interfiera en sus decisiones y mucho menos en su vida. Pero esto no significa que no los tenga en cuenta, porque sí lo hace, al fin y al cabo son su familia y ellos querrán siempre lo mejor para su hija. Pero, lastimosamente, esta vez no era el caso. Su relación con Jungkook no estaba en discusión y no era un tema para debatir. Era muy sencillo, se aman y está completamente segura que es con él con quien quiere compartir el resto de su vida.

¿Le dolería?. Sí, pero Hyori se casaría igual aunque a su padre no le parezca,porque es su decisión, no la de él ni de nadie más. Vive por ella y para ella y si no piensan respetarlo,que no se opongan. Es simple,se lo había dejado claro varias veces a Jungkook.

Y he aquí el problema.

Él quería que su padre lo acepte,no causar controversia entre padre e hija,está en su poder solucionar esto y lo haría por sí solo.

— Yo vivo aquí,cielo.– Hyori entrecierra lo ojos,sabía que Jungkook tramaba algo.—  Soojin tuvo un problema familiar,volvió a Daegu,así que la pijamada se canceló hasta que vuelva.– explica la situación. — Te lo iba a decir justo ahora,pensaba llamarte,pero tú, ¿qué haces aquí?

— Pues..yo..– traga en seco. Siente la mirada de su novia atraversarle el alma.

Si,un tanto exagerado,pero sus emociones solían aumentarse ante sus nervios.

—..también vivo aquí,¿no es así suegrita?.— Jungkook finalmente ingresa al hogar escuchado la risa de Eunji,madre de Hyori.

— Por supuesto,Guk,ésta es tu casa.– Eunji amaba a Jungkook, a diferencia de lo que era su esposo. Quería y apreciaba mucho a Jungkook por hacer feliz a su hija, y no solo por eso, era un gran ser humano, alguien atento y cariñoso, bastante voluntarioso, tenía un gran corazón y mientras sea así,él siempre sería bien recibido.

Hyori se acerca y besa la mejilla de su novio,aún no lo había saludado como corresponde.

— Trajiste helado,perfecto.

Jungkook sonríe.

— Estaba en videollamada con Somi,creo que aun está conectada,sube arriba y trae galletas,ya sabes en donde están.— deja nuevamente un casto beso,pero Jungkook impide que se vaya abrazándola por detrás.

— ¿Puedo quedarme a dormir contigo?.– le susurra mordiendo el lóbulo de su oreja. Hyori se remueve por las cosquillas.

— Despídete de mis padres y luego entra por la ventana.– le susurra de vuelta y corre hacia las escaleras.

Finalmente quedan solo la madre de Hyori y Jungkook.

— Espero y te hayan gustado las flores.–

— ¿Flores?.– pregunta Eunji,ella se encontraba en la cocina. Jungkook va hasta allí.

— Yo..– el basurero está al lado suyo,en donde observa la botella de vino que había traído ayer como ofrenda. Estaba en la basura.

Un sentimiento de tristeza lo invadió.

— hace mucho que no vengo..– sonríe con nostalgia. No debía dejar que lo afectará,era evidente que no pudo haber sido tan fácil,la lucha era demasiado difícil y lo sabía,su suegro no lo dejaría ganar por más de que demostrara que era un ángel caído del cielo,no lo dejaría jamás.–..¿Sabes en dónde están las galletas?.— y justamente aquello era lo que lo motivaba más.

No se daría por vencido.

Y más porque logró notar que la botella estaba vacía.

Al menos se lo había tomado.

Ya era algo.


Estaré leyendo sus comentarios. 

𝐑𝐔𝐃𝐄 [𝐉𝐉𝐊]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora