Styles
Harry se encontraba en su camioneta, no prestaba mucha atención mientras iba rumbo a su casa, iba sentado en los asientos traseros, viendo el paisaje californiano que veía todos los días pero que ya no le importaba mucho, siempre era igual, sol playa, palmeras, no había nieve ese diciembre y tampoco la habría nunca y no le importaba porque no era muy fan de ella.
Esa aburrida mañana en la camioneta iba pensando en el estrés y emoción que le causaba ser el productor de una película romántica nueva, una película navideña de la cual él había tenido la idea y que ahora se haría realidad gracias a él mismo.
Al menos eso le quitaría la etiqueta que ahora tenía como actor.
La academia, o cualquier juez, no lo consideraba serio, alguien digno de algún premio realmente importante, y esperaba que al menos con eso, con esa película todo el mundo lo dejara de conocer solo como una cara bonita de una serie de películas de fantasía y lo reconocieran como alguien talentoso y capaz de hacer muchas cosas más.
-¡Harry! - lo llamó alguien fuera de la camioneta, justo cuando había llegado a su casa.
Paparazzi.
Había al menos una docena de ellos esperando a que bajara del vehículo para poder tomarle una foto, para poder entrevistarlo o solo grabarlo y cambiar todo lo que saliera de su boca, sacándolo de contexto para hacerlo quedar mal ante sus fans y toda la gente que pudiera llegar a seguirlo.
No era la primera vez que había pasado y no le agradaba que quisieran tratar de meterse en su vida privada, eso había arruinado tantas cosas en su vida, muchas relaciones con personas que se habían alejado.
-¡Una foto para el periódico Times!
- ¡Harry una foto!
-¿Cómo se siente tener que volver a trabajar con tu novia en tu nueva película? - preguntó uno de ellos, algo que lo horrorizó, él y Alex estaban lejos de ser pareja otra vez.
-Ex novia - respondió él casi al instante - Pero va a ser una buena película.
-¿Son ciertos los rumores de que ustedes dos volvieron?
Cuestionó otro paparazzi, pero la verdad es que estaba un poco abrumado de todo el ruido que había en donde se supone que era su hogar, la residencia que había comprado para tener paz, la residencia en la cual nunca había.
-Adiós - les dijo Harry, bajándose del auto y siendo escoltado por su guardaespaldas hasta la puerta mientras los molestos paparazi los seguían y hacían preguntas que ya no quería responder, siempre era lo mismo de todos modos.
Lo primero que vio una vez adentro, fue a su asistente, Rosalie, poniendo un bonito y gigante árbol de navidad.
Ella estaba decorándolo expertamente, colgando esferas y listones, poniéndolo bonito con adornos dorados y plateados en forma de estrellas o regalos que combinaban muy bien con su sala beige que nunca había usado porque siempre estaba fuera y su casa estaba vacía todo el tiempo.
-Rosalie ¿qué es eso? - preguntó Harry algo confundido de ver eso allí.
Pero la rubia solo dejó lo que estaba haciendo y con una sonrisa cálida habló.
-Es un árbol de navidad.
-Sí y es hermoso - respondió él al instante porque sinceramente ella había hecho un gran trabajo - Pero... ¿por qué está en mi casa?
-Porque ya casi es navidad y todos necesitan un árbol - respondió ella con obviedad.
Eso era un gesto bonito, lo conmovió un poco, pero a él no le gustaban mucho los árboles de navidad y nunca ponía, siempre salía de vacaciones a algún lugar cálido lo más alejado posible de la nieve y ese año ni podría hacerlo por la película que estaba produciendo.
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Christmas In Homestead [Larry Stylinson]
FanfictionDonde Harry es un actor mundialmente conocido que quiere rodar su próxima película en un pueblito en medio de la nada. Donde Louis es dueño del único hotel y alcalde de Homestead y se opone rotundamente a que se grabe una película en su hogar. 𝐀𝐃�...