Harry enojado y los siete

Capítulo 31

Capítulo 31 ||

No fue hasta mediados de la semana siguiente cuando Dumbledore, una vez más, llamó a Harry a su oficina.

Al entrar con Daphne y el profesor Flitwick, Harry dijo: "Sabes, Albus, estoy llegando rápidamente al escenario en el que estoy considerando instalar mis propias sillas personales aquí".

Dumbledore solo sonrió y transfiguró la silla frente a su escritorio en una mejor versión del sofá de dos plazas que Harry había creado a fines del año pasado.

"Definitivamente quiere algo", pensó, mirando de reojo a Daphne mientras la ayudaba a sentarse. Pudo ver que Daphne había llegado a la misma conclusión.

Después de sentarse, Dumbledore tenía los ojos brillando con la expresión de su amado abuelo; y preguntó: "¿Y cómo estás hoy, Harry?"

"Estoy bien, gracias, Albus", dijo Harry. "Y también, creo, es la señorita Greengrass".

"Hmmm ..." dijo Dumbledore. "Necesitaba hablar contigo sobre algunos artículos que fueron retirados de mi oficina y aposentos aquí justo después del día de Navidad".

"¿Crees que pude haberlos robado, Albus?" preguntó Harry con una expresión de sorpresa que rayaba en una justa indignación.

"¡No no!" respondió rápidamente. "Creo, sin embargo, que los agentes que actuaban en su nombre se los llevaron sin saber que tenía el permiso de su padre para retenerlos durante un tiempo".

"¡Ah!" dijo Harry. "Ese sería el mismo permiso que revoqué clara y concluyentemente poco después del comienzo del año escolar. También recordará que a principios de noviembre le informé claramente que tenía hasta el día de Navidad para devolver lo que aún quedaba en su posesión o control; o haría arreglos para que se los quiten.

"Creo que, de hecho, la recuperación tuvo lugar poco después del día de Navidad. ¿Serían esos los elementos a los que se refiere?"

En lugar de responder, Dumbledore ignoró la pregunta y dijo: "Me quitaron algunos de mis recuerdos muy privados cuando los duendes vinieron y me quitaron mi pensamiento que ..."

" Mi pensamiento, Albus," interrumpió Harry. "Después de todo, estaba claramente marcado con el escudo de Potter."

Hubo una ligera vacilación por parte del anciano antes de decir: "Bastante. Ahora, había varios de mis recuerdos personales y muy privados dentro: el pensieve cuando fue tomado. Me gustaría tenerlos de vuelta".

"Ya veo," dijo Harry.

"Ahora me gustaría acompañarte al lugar donde se encuentra actualmente mi - el - pensieve, para que pueda recuperar mis recuerdos lo antes posible", dijo el anciano. "He reorganizado parte de mi horario para que podamos partir aquí el sábado por la mañana para viajar a la ubicación actual del pensieve para poder efectuar la recuperación".

"Bueno, ya ves, Albus," dijo Harry adoptando su propio semblante de abuelo. "Me temo que eso no será posible".

Pudo ver que el anciano comenzaba a erizarse un poco, así que levantó la mano en un gesto de calma. "Cálmate, Albus."

"Ahora, la razón por la que dije que no sería posible, es que estás operando bajo la creencia errónea de que los recuerdos que estaban dentro de mi pensieve cuando lo vi por primera vez después de que se recuperó, todavía están dentro del pensieve. No creo que es el caso."

Con los ojos sin parpadear más, Dumbledore preguntó: "¿Y dónde estarían?"

"Puede que tenga que preguntarle a los duendes", respondió Harry. "Les pedí que se los quitaran".