Luego de tener mi ultima clase, salí del instituto y me dirijo a mi bicicleta, saludando a Niall con la mano a lo lejos . 

No es el mejor transporte pero mi madre debe ir a trabajar con el auto en las mañanas y no tiene el suficiente dinero para comprar otro innecesariamente. Gemma se maneja con el transporte publico para ir a la universidad y en caso de que mi madre no lo este usando, ella suele utilizarlo para la universidad o para ir a trabajar. Se que trabajar estando en la universidad es todo un dolor en el culo por la falta de tiempo, exámenes y cosas así y teniendo el auto, no pierde tanto tiempo como esperando el colectivo o viajando en tren o subte. Así que me conformo con mi vieja y gastada bicicleta. Algún día podre comprar mi propio vehículo. Espero.

Estaba por agacharme para sacarle el seguro y ponerle la clave pero me detuve cuando escuche a alguien llamando a mi nombre.

—¡Oye, Harry! ¡Harry!¡Hola!

 Levante la vista para ver de quien se trataba.

—¡Hey, hola! ¿Cómo estas? No te veía desde el año pasado. ¿Qué tal todo?—pregunto una muy emocionada Raquel, que venia corriendo desde el otro lado del parque, se veía agitada.

—Hola, Kelly.—respondí el saludo, llamándola por su apodo —Estoy bien, ¿Qué tal tu? No te he visto en el UPD.

Ella hizo una mueca con una sonrisa en el rostro, haciendo un ademan con las manos.

—Oh, sabes que no me gustan esas cosas. ¿Salir a corretear por ahí, gritando, medio desnuda y con la cara pintara? No, gracias, paso.—reímos — Además, estaba ocupada. Una saga de libros de misterio me estaba esperando, ¿Qué esperabas?—agrego con una cara de obviedad.

La verdad era que Raquel era una de las chicas que mejor me caían de este lugar. Es de esas chicas que pueden parecer tímidas pero cuando la conocías, realmente te llegabas a sorprender. Pero tampoco era la típica chica asocial, extremadamente tímida, que se negaba a salir al mundo real. Solo viviendo en las fantasías de sus libros favoritos. Ella no es así. Si, le encantaba leer y si fuera por ella, estoy seguro de que si le dieran a elegir para vivir la historia de algún libro, elegiría alguno lleno de misterio, sangre, psicópatas y asesinos. Le gusta sentir esa adrenalina al leer. Decía que los clichés le daban arcadas y no podría estar mas de acuerdo.

 También, era muy guapa. Su pelo negro brillante le caía por la espalda baja, tenia piel blanquecina, ligeramente salpicada de pequeñas pecas cafés y tenia los ojos mas azules que haya visto. No media mucho menos que yo pero le saco unos cuantos centímetros.

 Siempre me cayo bien, además es muy divertida y extravagante. No tenia muchos amigos pero a mi parecer, es porque ella lo deseaba así. Mas bien es del tipo que es sociable cuando tiene ganas y cuando no, no lo es. Si, eso.

Al final, asentí dándole la razón.

—Si, es verdad. No fue la gran cosa, pero fue divertido.—opine y me encogí de hombros—Casi venden a Niall a un grupo de chicas por un cajón con alcohol. 

Kelly soltó una risa al cabo que abría los ojos como platos.

—¿Quién querría comprar a Niall?

Ella suspiro sonriendo.

—Harry, es irlandés.—dijo seriamente, como si esa seria una respuesta completamente valida. La mire desconcertado— Con eso te digo todo.

—Los adolescentes hacen cualquier cosa por un poco de alcohol. Están dementes.—bufe. Yo no tomaba alcohol, ni una gota.

Desde que me entere que mi padre era alcohólico y maltrataba a mi madre cuando yo apenas era un inocente bebe, jure no beber una gota de alcohol nunca en lo que me quedaba de vida. Hasta ahora, la promesa sigue en pie y planeo que siga siendo así.Es algo extraño ser adolescente y no tener curiosidad por como seria tomar aunque sea un trago, pero no me arriesgare. Odiaría convertirme en el intento de padre que tuve. Era un alcohólico, maltratador, agresivo imbécil de mierda. Primero muerto antes de ser como esa escoria.

I hate you because i love you-[Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora