05. Amor de verano

1.6K 67 4
                                    


≫────≪•◦ ❈◦•≫────≪

≫────≪•◦ ❈◦•≫────≪

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

≫────≪•◦ ❈◦•≫────≪


Les pregunto ¿alguna vez tuvieron un amor de verano? Porque yo si, fue de las mejores experiencias que he vivido hasta ahora y sin duda alguna el mejor sentimiento que puedes llegar a sentir.

Recuerdo perfectamente el nombre de aquel chico de lunares que había robado mi amor en aquel verano, su nombre era Dylan. Su abuela y la mía eran muy amigas por lo que fue gracias a ellas que conocí al castaño chico y a su hermana que por un largo tiempo se había vuelto mi mejor amiga.

La primera vez que lo había visto me había perdido por completo en aquellos ojos miel que tanto me gustaban apreciar, en especial en las tardes donde el atardecer se teñía de colores rojos y anaranjados.

Amaba pasar mi tiempo junto aquel chico que hacía que mis mejillas se pusieran rojas con tan solo mirarme, amaba el simple hecho que el estuviera conmigo, y como me hubiera gustado decirle que se quedará conmigo para siempre.

Mi abuela solía decirme que solo era un amor de verano, que lo superaría y seguiría con mi vida, pero hoy en día no he podido olvidarte Dylan porque nadie más me a hecho amar de la manera en la que tu lo hiciste.

Me gusta recordar los lindos momentos que juntos pasamos, como la vez que me diste aquel anillo plateado como símbolo del amor que nos teníamos. Aún lo conservo y sigue brillando igual que el primer día que me lo diste. Por supuesto como olvidar la vez que ayudamos a conocinar a mi abuela, fue todo un desastre pero las risas y sonrisas de felicidad que tu y yo teníamos las tengo grabadas en mi memoria.

Recuerdo el primer beso que nos dimos en aquella tarde tan majestuosa que el cielo nos regalaba, fue tan increíble que sería casi imposible describir en la manera que me hiciste sentir. Esa tarde volví a casa de mi abuela con una sonrisa de oreja a oreja como ella decía, mis ojos brillaban de felicidad y no paraba de decir lo feliz que me hacías.

Pero como toda relación teníamos problemas. Muchas veces fueron por una completa tontería como que tu te comieras la última rebanada de pastel o que yo me comiera tu dulce favorito y al final de todo terminaramos riéndonos de nosotros mismos.

Amaba esa parte del día cuando tu y yo cantabamos nuestras músicas favoritas y, aunque a los vecinos no les gustará el ruido que hacíamos, nosotros seguíamos haciéndolo cada día porque eso nos hacía feliz, porque amabamos ver nuestros rostros de felicidad cuando ambos estabamos juntos.

Recuerdo que en el pueblo en donde yo vivía muchos decían lo bien que nos veíamos, recuerdo cuando Bella dijo que notaba el amor que nos teníamos el uno al otro y como te pusiste rojo mientras dejabas un beso en mi mejilla.

Aún conservo cada una de las cartas que solías darme y cada vez que las vuelvo a leer me llevan a la primera vez lo hacía y lo mucho que me sonrojaba cuando terminaba de leerlas.

Dylan O'brien se había convertido en mi primer amor, en el amor más importante que pude haber tenido pues fue con el con quien experimenté el verdadero y sincero amor. Dylan quien en algún momento fue mi chico había sido mi lugar favorito y mi lugar seguro en todo el mundo, aquel chico se había convertido en la luz de mi oscuridad.

Si en algún momento de mi vida me preguntarán el nombre sobre la persona que más feliz me ha hecho, sin dudarlo diría el tuyo y el de la abuela.

Sin embargo como toda historia debe haber un final, el nuestro no fue malo, creo que fue justo y lo correcto para las dos. Aquellos últimos días de verano me hubiera gustado estar mucho más tiempo contigo pero entendía que tenías cosas que hacer. Recuerdo como mi corazón dolía al pensar que quizás era la última vez que te vería, la última vez que vería tus ojos, la última vez que hablaríamos y, aunque tu me prometiste que estaríamos en contacto, mi mente me decía que eso no pasaría y que crees, fue justo lo que pasó.

Aquel día que partiste de aquel pueblo, donde nuestra historia había comenzado así como estaba terminando, no había parado de llorar porque empezabas a hacerme falta sin embargo, sabía que no podía hacer nada para tenerte y que volvieras conmigo, tu tenías una vida en las grandes ciudades mientras yo la tenía en aquel pueblo que tanto amo.

Los meses pasaron y habíamos perdido el contacto, además tu abuela había tenido que mudarse por lo que definitivamente no podría volver a verte. Tarde mucho en entender que en realidad tu no volverías y que nuestro amor solo se quedaría en un amor de verano.

Dylan, tu nombre resuena en mi mente cada día que pasa y deseo volver a verte, volver a escuchar tu voz, volver a ver tus ojos miel que tanto me gustaban. Mi precioso y doloroso amor de verano, cuanta falta me has hecho.

Suspire una vez que había terminado de escribir, está sería la última carta que escribiría sobre el chico castaño. Cerré mi libreta y guarde mi bolígrafo junto a ella, abrí mi bolsa sacando el dinero para pagar el café que había pedido pero antes la persona que anteriormente me había atendido se acercó a mi.

—Señorita esto a sido enviado para usted, además la cuenta está pagada.—me dijo antes de irse recibiendo un pequeño "gracias" de mi parte.

Confundida, tomé aquella hoja leyendo lo que contenía.

"Me siento verdaderamente feliz de
volver a verte, no sabes lo mucho que
te he extraño, nunca haz salido de mi
mente
mi dulce y preciosa T/n, por cierto te
ves demasiado bien con aquel abrigo."

Psdta: Te gustaría mirar al frente tuyo."

Por más que no quisiera la curiosidad era mucho más grande que yo, además por alguna razón que yo sabía mi corazón empezó a latir muy rápido pues aquella letra se me hacía extremadamente familiar. Un cosquilleo se formó en mi estómago y los nervios no tardaron en llegar.

Tomé un respiro antes de alzar la mirada, fue entonces cuando mi corazón gritaba de felicidad y sin poder evitarlo una pequeña sonrisa se formó en mi rostro. Frente a algunas mesas de la mía se encontraba el chico de ojos claros de quien había estado enamorada desde mis 18 años y quien se había robado mi mente por completo, la persona que más había amado en mi vida estaba sonriéndome como solo el sabía hacerlo.

𝒜𝓁𝒾𝓈𝓈-𝒮𝓉𝒶𝓇𝓀:).

One Shots ! Dylan O'brien Donde viven las historias. Descúbrelo ahora