Narra jack.
Cómo cada mañana, un rayo de luz iluminaba mi rostro haciendo que despertará justo a tiempo.
Con un quejido me levante de la cama y mire de inmediato mi torso desnudo en el espejo que estaba frente a mi cama.
No parecia que el día de hoy cumplia la mayoría de edad, seguía igual de escuálido y pálido.
-Feliz cumpleaños! - mi madre había entrado por la puerta con un enorme pastel junto a mi padrastro y mi hermanita.
- Feliz cumpleaños hermanito - brinco a mi cama mi pequeña hermana Nancy, sus pequeños risos dorados por poco entran en mis narices, sonreí, era igual a su padre de risueños, era contagioso, una sonrisa salió por mí rostro y la envolvi en mis brazos.
- Feliz cumpleaños, ya eres un adulto - me dio un pequeño golpe Sam, mi padrastro.
- gracias - sonreí ladido una vez que Nancy me soltaba y salía corriendo de la habitación en busca de algo.
- pide un deseo y sopla la vela - invitó mamá con una enorme sonrisa.
Un deseo...
Mi único deseo era poder volver a verlo, sin el, nada de esto hubiera sido posible.
Junte mis manos y en mi mente aparecía aquel ángel oscuro, que aunque parecía terrorífico y frío, era alguien cálido, llegue a pensar que era producto de mi imaginación, sin embargo podía sentirlo en las noches mientras dormía, y durante las mañanas cuando la brisa chocaba en mi cabello.
Llene mis pulmones de aire y apague todas las velas, con el sueño y deseo de volverlo a ver una vez más.
- Bien, ¿que pediste? - preguntó Sam sacándome del trance.
- es un secreto, si te lo digo no se cumplirá.
- Bueno, tienes razón - se rasco la Nuca - los espero abajo, aun hay que ir a la escuela. - indicó el saliendo con una sonrisa.
- Hijo - mi madre dejó el pastel en la mesita de noche y se acerco a mi abrazándome, el aroma de mamá inundó mis fosas nasales haciéndome sentir paz.
Le respondí el abrazo.
- soy la mamá más feliz de este planeta, puedes ser un anciano y seguirás siendo mi bebe - se apartó de mi con una pequeña lagrima y beso mi frente.
- te espero abajo - dijo ella limpiando su lagrima.
En serio estaba agradecido con la sombra por todo esto, gracias a él mamá y yo ahora estamos bien.
Gire mi cuerpo en dirección al costado de la cama para poder iniciar mi día.
Toque el piso, sorei de lado, el había venido a verme, el piso estaba tibio, podía sentir que estuvo aquí.
Continúe con mis pasos hacia el pasillo para dirigirme al baño, me bañe y lave mis dientes, aun con la piel mojada salí del baño y regrese a mi habitación.
Narra cedric.
Hoy por fin era el día.Miguel había podido hablar con su padre para dejarme hablarle a jack antes de que mi tiempo terminará.
La condición era que debía perder mis alas, puesto que sabía que con ellas yo seguía siendo una amenaza en la tierra.
Acepte, y con ello un símbolo apareció como tatuaje en mi pierna derecha, sabía que con eso mi vida estaba condenada.
Pero, la verdad es que mi vida ya no me pertenecía hace mucho.
Miguel, me había ayudado a tener esta forma, me mire en el espejo, en serio me veía como un humano.
Mis manos eran pálidas y podía sentir como la sangre corría por ellas, mis ojos y cabellos era negro, y podía escuchar mi propia respiración y latidos del corazón.
- Es raro la primera vez, pero te acostumbraras - Me animo Miguel, quien tenía forma de un chico de mi estatura, su cabello era rubio y sus ojos color azul brillante.
- oye, no se mucho de belleza humana pero, ¿porque tu eres un galán de televisión y yo soy un chico friki? - mí apariencia era de alguien que no salía a la luz del sol, incluso tenía ojeras.
- Yo no hice eso, en alguna de tus vidas fuiste así, es tu apariencia humana.
- ¿yo fui humano alguna vez? - pregunté ingenuo viéndome al espejo de nuevo.
No podía ría imaginarlo.
- así es, todos estuvimos en la tierra, pero sólo algunos debemos permanecer en el reino, ya sea el reino oscuro o el reino de luz.
Las palabras de Miguel sólo me causaban más intriga, sabía que yo no era alguien bueno, había cometido cosas inperdonables, pero ¿aún siendo humano yo hacía esas cosas?
- ¿porque soy un demonio? - pregunté viéndolo de frente, el solo sonrió y negó con la cabeza saliendo del baño público.
Lo seguí hasta afuera y el me miró.
- no es algo que yo pueda decirte, debes averiguarlo - hizo una seña con la ceja indicando al cielo, Miguel estaba siendo observado.
- a veces el reino de luz me da miedo - murmure comenzando a caminar, era la primera vez que veía el mundo desde esta perspectiva, todo era más colorido y los sonidos retumbaban más en la cabeza.
- debemos ir a la escuela de jack - dijo Miguel - Es hora de que puedas verlo.
Pude sentir como mi corazón se aceleraba y la sangre se juntaba con velocidad en mis mejillas.
Era verdad que siempre lo veía, pero el no me veía a mí, y escuchar de su boca mi nombre era lo que necesitaba para marcharme al reino oscuro.
- ¿estas seguro de esto Cedric? - preguntó Miguel cuando me perdí en las nubes - sabes que si cruzas esa línea no hay vuelta atrás para ti.
Lo sabía, sabía lo que me esperaba allá abajo, pero aún así Jack valía toda la pena.
- lo sé - respondí - y es claro que sabes cuál es mi respuesta - respondí viéndolo a los ojos firmes, asintió y comenzamos a caminar de nuevo hacia la escuela de mi amado jack.
¿Que era lo primero que le diría?
Hoy hace justo 18 años lo había visto por primera vez, y debía actuar como si jamás lo hubiese visto.
Es absurdo, ya que conozco su manía por sacar la cebolla de cualquier plato que le sirvan, o cada lunar de su cuerpo al ducharse, o que de vez en cuando sueña con una dona gigante.
Aún así, quería conocerlo más, y conocer más este sentimiento.
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El demonio que se enamoró [Yaoi\ Gay ] ( EMISIÓN)
RomancePara un demonio es la desgracia, para un angel es un gozo y los humanos le llaman amor. la mayor desgracia de un demonio es enamorarse, la perdición de su amado es su perdición también. Jack tiene 18 años, y siente una gran aura seguirle a todos lad...