𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 1 - 𝕷𝖔𝖘 𝖘𝖊𝖈𝖚𝖊𝖘𝖙𝖗𝖔𝖘

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- ¿Ha oído de los 15 jóvenes desaparecidos?

Sí, lamento mucho que jóvenes tan talentosos desaparecieran sin dejar rastro alguno... -

- Qué podrí-

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"Vive... Vive y causa desesperación en los demás"


Esas eran las últimas palabras que logró oír de su amada abuela mientras ella cerraba sus ojos lentamente hasta quedar completamente muerta.

Yumei Kagehara

Ese era el nombre de la anciana que lo ayudó cuando al parecer su vida estaba por acabar y no tenía nada ni a nadie, la anciana que le regaló su apellido y una gran fortuna, además de ser el único ser que aceptó como familia.

- Buenos días... ¡A mí! - Dijo mientras soltaba una risita y se veía en un espejo.

Sus ojos rojos mantenían ese gran brillo en sus ojos mientras observaba como los estudiantes llegaban en esas grandes camionetas al gran y hermoso lugar donde se daría inicio a los juegos de desesperación, todo estaba yendo de acuerdo al plan.

- ¡Muy bien!, ¡Repasemos!... Soy Shuichi Kagehara... ¡El increíble genio que preparó unos espectaculares e increíbles juegos de desesperación para todos estos patéticos y estúpidos alumnos de academia! - Dijo mientras agradaba su sonrisa y observaba a los Monokumas trabajar.

Sin duda había esperado mucho por esto, se veía la emoción en todas sus expresiones faciales, haría de eso un completo y verdadero show, uno como nunca antes visto.

Una vez terminó de arreglarse estaba dispuesto a presentarse a esos estúpidos estudiantes, pero sabía que debía esperar a que todos estuvieran despiertos para empezar con la primera actividad. Todo había sido hecho para que nadie escapara y todos jugaran, a excepción de él, claramente.

- ¡Aww!, ¡Que tiernos se ven todos! Me pregunto cómo se verían sumidos en la desesperación~ - Dijo Shuichi mientras se abrazaba a si mismo y se sonrojaba.

En eso uno de los monokubs se acercó mientras se sentaba en su regazo, el color rojo le quedaba encantador.

- ¡Monotaro! - Dijo mientras el monokub lo abrazaba.

Sin duda que todo estaba bien, quién necesitaba amigos cuando podías tener a los Monokubs y eso sería suficiente. Los amigos no hacían más que estorbar sus planes y además, no por nada sentía que su cabeza daba vueltas cuando analizaba las cosas.

↬↬↬𝕰𝖝𝖙𝖊𝖗𝖒𝖎𝖓𝖆𝖓𝖉𝖔 𝖆 𝖑𝖆 𝖉𝖊𝖘𝖊𝖘𝖕𝖊𝖗𝖆𝖈𝖎𝖔𝖓↫↫↫ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora