María alexandra era una chica del año 2021 que había terminado enfermería con tanto esfuerzo, sus "amigas" decidieron irse a un acompañamiento para festejar su maximo logró, aunque para María no quisiera ir, sin embargo algo cambia cuando una de ell...
Por alguna razón......el corazón y el pensamiento de María se apagaron en el momento que paso la noche de henna.
Para todos, la noche de henna fue la mas hermosa pero para una sultana otomana es la peor manera.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Todo el pueblo estaba feliz debido a la gran cantidad de comida dada un día antes del sello matrimonial.
La parte de la noche María no podía dormir, se sentía tan triste que esa noche lloro tanto que quedo silenciada.
En cuanto amaneció, las esclavas llevaron las telas azules que había escogido María, si de algo se...es que el pensamiento de María estaba roto.
No tenía un pensamiento fijo.
-mi sultana...tiene una carta.- habló tice entregando un pequeño sobre con una caja.
María solo lo miro para luego dejarlo a un lado, no se sentía lo suficiente cuerda para leer cosas que tal vez la harían llorar o en este caso matarse.
La vestimenta que portaba María era realmente hermoso, era azulado con algunos detalles dorados dejando así mismo una belleza total.
Una vez que María tomo su velo y fue cubierta, comenzó a salir del Palacio donde todas las mujeres del harem estaban en filas agachando su cabeza al suelo.
-les deseamos buena suerte mi sultana mihirmah- dijeron las criadas del harem al mismo tiempo cosa que Maria comenzó a salir.
Mientras avanzaba por aquel camino, fijo su mirada arriba donde pudo ver a la sultana kosem con sus hijos viendo a María partir.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Kosem hizo una reverencia ante la vista de María, acción que le siguieron sus hijos.
De ante mano sabía que en ese momento kosem había logrado sacarla del Palacio pero no eso detendría que María se diera por vencida.
Con la frente en alto, María partía a su nuevo hogar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
