▍𝟬𝟬𝟭. shut up

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La mansión Potter se había vuelto en centro de un evento catastróficamente inesperado y devastador que sacudió a toda la comunidad mágica. Era una fría tarde en las calles de Londres, nadie podía imaginar la erupción de un incendio tan feroz. Los vecinos que caminaban por las frías y tranquilas calles jamás habrían imaginado presenciar un fuego tan vivo, y el hecho de que tal tragedia no se hubiera cobrado las vidas de Fleamont y Euphemia Potter, junto a su pequeño primogénito James, se consideraba un verdadero milagro.

Las teorías y rumores sobre el origen de ese desastroso incendio eran bastante variadas como la misma comunidad mágica. Algunos sospechaban sobre un intento de ataque por parte de las fuerzas oscuras que acechaban en esos tiempos, mientras que los muggles con los que compartían vecindario se inclinaban por una simple vela mal colocada o una chispa que hubiera podido detonar todo aquello. El Ministerio de Magia a sabiendas de los tiempos oscuros que se podían avecinar, habían tomado medidas para proteger la mansión mientras investigaban las causas exactas de la tragedia y así poder descartar si había sido un ataque o un simple incidente.

En medio del caos y la confusión que envolvía en esos momentos la mansión Potter, muchas familias y amigos cercanos del mundo mágico expresaban su preocupación y solidaridad. Entre ellos destacaba la familia Yaxley, una familia con profundos lazos de amistad con la familia Potter. Tanto Fleamont como Adam Yaxley habían compartido aquellos siete apasionados años en la casa de los leones, Gryffindor durante esos años en Hogwarts. Su amistad había perdurado a lo largo de los años y cuando se enteraron de la tragedia que había golpeado a los Potter, no dudaron ni dos segundos en que no podían permitirse que se quedaran en cualquier lugar. Con un sentido de responsabilidad y afecto, los Yaxley ofrecieron su hogar como refugio temporal para los Potter, pues sabían que si una catástrofe así les ocurría a ellos Fleamont y Euphemia no dudarían tampoco en hacer lo mismo. Pues la solidaridad entre familias mágicas era un pilar fundamental en tiempos de crisis, los lazos entre los Yaxley y los Potter se fortalecieron aún más.

Adam y Lyra Yaxley eran una familia de sangre pura por ambas partes de la familia, ambos habían tenido la suerte de no caer en los cánones de la sangre pura que se les impartían a la mayoría de niños de sangre pura, sobre todo a aquellos que solían acabar en Slytherin que parecían buscar de cualquier forma que la sangre perdurara. Lyra era una chica de Ravenclaw cuando conoció a su esposo un día en Hogsmeade junto a Fleamont y su grupo de amigos de la casa de los leones, ambos en ese momento hicieron contacto y casi a los pocos meses empezaron a salir. A los dos años de salir de Hogwarts, Adam no pudo aguantar más y le pidió matrimonio a Lyra y al tiempo nació su única bendición, Bianca Yaxley. Bianca tenía la edad de James, ambos se conocían desde siempre y al igual que sus padres eran mejores amigos, así que la presencia de James no fue rechazada.

Mientras el Ministerio de Magia continuaba su investigación para descubrir la causa del incendio en la mansión Potter, las familias mágicas en general se unieron en un gesto de apoyo y solidaridad que se recordaría para siempre en aquel trágico episodio que se podría considerar un aviso por parte del bando oscuro.

Los Potter se habían quedado durante varias semanas a tal punto que consiguieron establecer una dinámica para una vivienda sin conflictos, a pesar de que los adultos no fueran a tener ni una sola pelea sabían que James y Bianca en cualquier momento podían llegar a tener alguna discusión.

Bianca se encontraba en medio de la búsqueda de unas servilletas de tela. Esa noche, su familia paterna vendría a cenar, y su estatura diminuta a veces le jugaba en contra al intentar alcanzar objetos en lugares altos. Además, no tenía una varita mágica ni el permiso para hacer magia ya que aún no era momento para ir a Hogwarts, lo que complicaba aún más su tarea. Mientras daba pequeños saltitos en un intento por alcanzar las servilletas, sintió cómo un brazo se deslizaba alrededor de su cintura. Al mismo tiempo, observó cómo otro brazo se estiraba hacia la caja donde se guardaban las servilletas de tela. Las mejillas de la joven pelirroja empezaron a teñirse de un intenso rojo carmesí por la situación acontecida.

𝐇𝐔𝐑𝐑𝐈𝐂𝐀𝐍𝐄 | JAMES POTTERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora