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Capítulo 3: Distracciones

Escrito por: ana_cp

Traducido por: peoniesforLan

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Librería Rabbit Hole, lunes, 16 de noviembre, 2:12pm

Lan Zhan sentía algo raro en el ambiente. Los lunes solían ser los días más ocupados y ajetreados para él, considerando que tenía charlas y conferencias casi todas las semanas a las 4:00pm. Sin embargo, hoy no había nada programado y, por lo tanto, todo estaba tranquilo. Estaba organizando el inventario y haciendo nuevos pedidos en su computadora cuando, de repente, escuchó que la silla de Wei Ying se movía.

Eso usualmente no significaba nada, pues Wei Ying se movía demasiado, hablaba demasiado, se reía demasiado y, sinceramente, era demasiado. Sin embargo, algo se sentía diferente esta vez.

El último cliente de Wei Ying fue hace treinta minutos y, desde entonces, había estado muy callado, algo que era muy extraño.

Lan Zhan permitió que su hermano escogiera a su nuevo empleado, pues después de todo confiaba en el criterio de Lan Huan. No obstante, actualmente no estaba tan impresionado con este nuevo empleado. A raíz del muy desafortunado incidente (un incidente que apenas recordaba, por si acaso) donde vio a Wei Ying sin camisa en el baño, el hombre no paraba de parlotear cuando estaban a solas, y Lan Zhan no sabía si eso era parte de su personalidad o si era porque estaba nervioso. Que una persona hablara demasiado era algo muy inusual.

En las dos semanas que Wei Ying llevaba trabajando aquí, Lan Zhan ya sabía tantas cosas sobre él que era abrumador. El hombre tenía 25 años, así que era tres años menor que Lan Zhan. Era un estudiante universitario especializándose en Física y su meta a largo plazo era ser profesor. Vivía con sus dos compañeros de cuarto y, según él, peleaban demasiado. Uno de los compañeros de cuarto era el hermano de Wei Ying, y con respecto al otro... aún no sabía qué relación tenían. Wei Ying no podía estar callado por tan solo quince minutos, y era tan guapo que llamaba la atención de los clientes, al punto de que varios se quedaban hablando con él después de comprar.

Lan Zhan debía hablar sobre eso con Wei Ying más adelante. Sinceramente, el problema no era que coqueteara con los clientes, el problema era que, si se quedaba hablando por mucho tiempo con ellos, luego llegaría otro cliente que podría terminar sin ser atendido. Lan Zhan no entendía por qué Wei Ying tenía que coquetear con todos para hacer ventas, pues a Lan Zhan le iba muy bien y no tenía que coquetear con nadie.

Muchas de las cosas que sabía sobre Wei Ying era basado en sus observaciones. De tan solo mirar las acciones de Wei Ying durante el día, Lan Zhan podía notar que el hombre era inteligente e hiperactivo, pero, a la vez, era muy perezoso. Él era de las personas que sabían mucho más de lo que aparentaba, pero solo decía lo necesario. En su tiempo libre, Wei Ying siempre pretendía que estaba estudiando cuando, en realidad, estaba ignorando los libros de física y estaba distrayéndose con otras cosas. Igualmente, a pesar de que Wei Ying decía que no leía mucho, se notaba que tenía un gran conocimiento en literatura.

Y también hablaba mucho. Demasiado.

El silencio de treinta minutos se terminó cuando Wei Ying suspiró exageradamente (y si no fuera por el hecho de que Lan Zhan había estado pendiente a él, se hubiera sobresaltado por el ruido abrupto). Wei Ying se veía muy afligido, y cuando notó que Lan Zhan lo observaba, volvió a suspirar con fuerza. Lan Zhan decidió no hacer nada al respecto, así que siguió escribiendo en su computadora sin decir nada.

Pero su decisión no valió nada.

Wei Ying se estaba acercando a él poco a poco, y Lan Zhan se preparó mentalmente para lo que sea que estuviera a punto de suceder, pues sabía que no sería nada bueno. Wei Ying se paró de brazos cruzados frente a su escritorio, esperando que Lan Zhan terminara de escribir. Sin embargo, cuando Lan Zhan no lo miró, aclaró su garganta para llamar su atención.