Capítulo IV

74 6 0
                                    

Aún sentía el roce de sus labios con los míos, llevé una mano a mi pecho y sentí mi corazón latir desenfrenadamente, no esperaba que Kihyun fuera a besarme, no esperaba que lo hiciera en éste lugar y sobre todo, no esperaba que me afectara tanto. Acaricié mis labios ligeramente húmedos, los labios de Kihyun sabían exquisitamente bien. Miré por ambos costados y pude divisar a algunos miembros del staff transitando por los pasillos, y esperaba que ninguno haya visto lo que sucedió.

Tratando de recomponerme y evitar que se notara el sonrojo en mi rostro me dirigí hacia los baños, al llegar fui directo al lava manos y vertí el agua fría, remojé una pequeña toalla y la llevé a mi nuca, repetí lo mismo y coloqué por toda mi cara. No era suficiente. El calor en mis mejillas no se iba, tomé un poco del jabón que se encontraba cerca y me lavé toda la cara, deshaciéndome de todo mi elaborado maquillaje, al acabar, podía sentir la frescura del agua. Sequé mi rostro y acomodando un poco mi flequillo volví al set de fotografía.

Al volver, los chicos no estaban, gracias a Dios. Me acerqué a Jun-shi que estaba abriendo una marmita de comida, al parecer todos se han tomado un tiempo para almorzar.

-¿Y esa cara? –Preguntó -Te guardé un poco de bibimbap –Dijo alcanzándome otra marmita.

-Gracias –Hice una reverencia.

-¿Dónde estabas? Ya se te habrá enfriado –Comentó llevando sus fideos a la boca.

-Fui al baño, me sentí un poco mareada, no te preocupes.

-Seguro han sido los flashes, a mi me ha dado un dolor de cabeza –Mencionó arrugando las cejas.

-Tienes razón –Comenté simplemente y degustamos nuestra comida.

Al cabo de un rato, los miembros del set regresaron y empezamos con los arreglos nuevamente, los chicos de iluminación hacían un excelente trabajo, los maquillistas en su improvisado salón retocaban a los chicos, y el personal de vestuarios había decidido probar los otros atuendos, éstos se veían sumamente hermosos. Eran esmóquines de un intenso color azul marino, casi llegando al color negro, con sutiles líneas en gris tan ceñidos que acentuaban la figura de cada uno. De reojo podía observar a Kihyun, terriblemente atractivo con los ojos cerrados mientras le corregían el maquillaje, una chica del vestuario le trajo unos gemelos para la camisa, con el seño fruncido y apretando su mandíbula lo vi colocarse en las muñecas, estaba totalmente embelesada.

Los flashes seguían, los polaroid eran bastante útiles en estos momentos, aprovechaba algunos momentos fugaces para sacar algunas fotos. Observaba como Jooheon dirigía a los chicos para entrar en el papel que representaban, cruzamos miradas un par de veces con Kihyun, sonreía de forma ladina cuando se giraba y cada ocasión las mejillas me ardían. ¿Cómo iba a poder evitarlo en estos meses? Lo seguía con la vista mientras se dirigía hacia las mesas y posaba con una mirada llena de arrogancia ante los flashes, una sonrisa se le escapaba de vez en cuando, a lo que Jooheon le decía que se vía perfecto.

-Al parecer tienes una buena vista –Un fuerte temblor de tomó por sorpresa.

-No me asustes así –Dije en voz baja regañando a Jun-shi.

-¿A quién miras? ¿Minhyuk? –Agudizó la vista tratando de enfocar a Lee –Vaya que se ve bien en ese traje –Comentó.

-Sí, se ve muy bien –Seguí su comentario.

-Pero obvio, no mirabas a Minhyuk ¿Algo que quieras contarle a tu mejor amiga? –Preguntó volteándose hacia mí.

-¿Qué? ¿De qué hablas?

-Por favor ¿Crees que no me di cuenta? –Me reprochó arrugando el ceño.

-¿Qué...? –Dije simplemente, estaba perpleja.

En tus brazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora