14: Hola señora Huening

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―Te he dicho que no te va a hacer nada

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―Te he dicho que no te va a hacer nada.

Negó.

―Choi... ― Retó.

El chico volvió a negar.

Soltó un suspiro cansado.

―Estás siendo un imbécil vamos a entrar, cenaremos y me contarás que te sucedió ― Jaló al mayor que se reusaba a cruzar la entrada de su vivienda.

Recapitulemos.

Maldecía a Acacia con todo su ser, si no fuera por su gran discurso no hubiera asistido a esa "cita" la cual parecía sacada de un drama, y no es fan de lo cliché.

Encontró al chico más egocéntrico de su escuela sentado en la esquina de un baño de cafetería blanco como un papel y cuando decide que lo ayudará desde lo blando de su corazoncito, ¡El muy idiota lo empuja y le dice que quería su café!.

Lo interrogó, obviamente.

Pero el tipo simplemente parecía hacerse el tonto ―suponía que con su orgullo dañado― como si no hubiera estado tan frágil en ese baño entre sus brazos.

Por otra parte, Soobin era un lío.

Kai sabía y había visto a conciencia propia más de lo que debería haber mostrado principalmente, pero no lo culpen. Él no contaba con que en tan inesperado momento sus problemas relucieran. Sin embargo, aquello era un tema irrelevante ahora, el verdadero problema era que Kai lo había traído casi arrastrando a su casa con la excusa de "Vas comer y luego me contarás todo " y pues NO.

Tan chismoso iba ser.

Escuchó la puerta ser abierta.

―Soobin-sshi cariño, que lindo tenerte aquí ― Saludo Huening Sumi al ver a su empleado llegar junto a su hijo.

―Si Kai-ah, yo también te extrañé mucho mi lindo hijito ― Imitó baratamente la voz de su madre, totalmente indignado.

Me arrepiento de haber llorado el primer día de clases, pensó.

―Yah bebé sabes que mamá te ama, pero me hubieras avisado que venias acompañado hijo ― Reprendió.

Bueno, ya no hay vuelta atrás.

―Lamento venir tan inesperadamente ahjumma ― Reverenció haciendo virar los ojos a su acompañante ―Pero Kai-sshi insistió.

Y sonrió tan cálidamente que a Kai le dieron ganas de ponerse a golpear el piso.

Maldito manipulador, espera que me regañen.

―¡Bien hecho bebé!, he estado queriendo traer a Soobin a cenar desde que nos volvimos cercanos, pero siempre tenía una excusa... Ah estoy tan contenta ― Okey, eso en definitiva no se lo esperaba ―Pasen, pasen, iré a avisarle a mi esposa.

深  salta sobre mi  ─  sookaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora