Lejos.

Razón.

Continúa.

Los Silva estaban irritados, bueno, solo los menores, Nozel estaba pensativo, si, estaba consciente de que los Black bulls podían pensar mal de ellos después de esa primera vez que los vieron tratar con su hermana, pero no tenía idea de que era lo que pensaban las demás órdenes.

Sabía que era muy probable que a el resto de las familias nobles no les iba a importar que es lo que hicieran por ella, no les había importado antes de todos modos, pero tal humillación frente al Rey mago no era algo ligero, así que tenían que demostrar que no eran unos incompetentes como esos plebeyos y los dos inútiles de la realeza, poco iban a saber que lo que se encontrarían fuera del edificio no iban a ser miradas pasajeras.

En el momento en que los tres salieron del edificio, el silencio estremeció sus cuerpos y las miradas fueron como hechizos con alto grado de daño, las personas que vivían ahí y que vendían ahí, que solo pasaban también, eran responsables de su incomodidad, algo que los desconcertó.

Poco sabían que los compañeros de su hermana ya se habían puesto a hablar con todo el que se cruzará para averiguar donde estaba Noelle, además de que muchos escucharon sus quejas sobre ellos, la discreción no era una palabra que conocieran o aplicarán, por lo que fue fácil para todos escuchar TODO, aunque con ayuda del resto de la gente que pasó por ahí pudieron ayudar a esparcir la noticia.

Él pueblo era el mejor para compartir información, ya sea falsa o verdadera.

Las miradas eran de desprecio, repulsión, asco, significaban todo menos algo bueno, ¿Que demonios le pasaba a esa gente?, Eran nobles, merecían respeto, no esas miradas tan feas de las que solo querían huir, pero no tenían porque hacer algo tan humillante, podían pasar sin importarles, y ahí es donde se equivocaron.

Una vez que pasaron frente los primeros tres puestos ya estaban reconsiderando su decisión, pues ahora sentían como si realmente les estuvieran juzgando más, a cada paso que daban, Nozel sin poder aguantar más aquello, creo a una águila de mercurio y subió a el, sus hermanos le siguieron y emprendió el vuelo a su base sin dejar de sentí algunas miradas mientras se alejaban.

Las personas dejaron de verlos una vez les perdieron de vista, sabían que esas personas de la nobleza eran un asco, pues su narcisismo y egoísmo eran de ver la mayoría del tiempo, pero como mínimo esperaban que fueran leales a la familia, al parecer no se podía esperar nada bueno de las órdenes de los nobles, ya tenían suficiente con que los elfos les eligieran para acabar con su reino para tener que enterarse de eso.

Además de todas las faltas de respeto que recibirán y recibieron de ellos, se lo tenían bien merecidas esas miradas, no se salvarían de ellos.

Con Noelle.

Sarah- Bien, ya que entendiste, te debo dar más lecciones

Noelle- ¿Y de que más tengo que aprender?

Sarah- ¿Eres ignorante?, A falta de una palabra más a amable, para que estés dispuesta realmente a estar el tiempo necesario que tomara saber todo esto

Noelle- ¿"Esto"?, ¿A qué te refieres con "esto"?

Sarah- A nosotros, lo que somos, de lo que serás parte, aunque sea por poco tiempo

Noelle- ¿Y porque debería saber?, ¿Que tiene de importante?