『WITNESS』𝙴𝚔𝚔𝚘 𝚊𝚗𝚍 𝙹𝚒𝚗𝚡

× 𝟚 - ℝ𝕖𝕔𝕦𝕖𝕣𝕕𝕠𝕤 ×

Ekko había quedado malherido, pero nada que no pudiera curarse; Estaba escondido en un pequeño rincón que quedaba en uno de los extremos del puente, pasando la noche ahí, intentando conciliar el sueño sin éxito.

"Ojalá esté bien."

Jinx no era de su agrado, y mucho menos después de unirse a Silco y haber matado a algunos de sus compañeros, sin embargo, tenían un pasado tan hermoso que era imposible de borrar, no podía desearle la muerte tan fácil.

El Sol ya había salido, y él seguía ahí sin poder moverse al tener la pierna lastimada, esperando que tal vez algunos de sus amigos fuera a buscarlo y lo ayudara a regresar al refugio. Pero, no fue un amigo quien lo encontró.

ーOh, ingenioso... Pero estas cuchillas parecen estar mal puestas. ーdivisó a alguien de tamaño pequeño tomar su patineta y hablar sobre ella.

ー Te equivocas. ーreplicó el moreno llamando la atención de la pequeña criaturaー Son para las fisuras, el aire es denso. ーlogró terminar la frase con dificultad, sacando un ligero quejido del dolor.

ー Oh, ¿Te encuentras bien? ーpreguntó el pequeño al oírlo tan débil.

ー Sí... Estoy bien... ーle era algo difícil hablarー Me torcí el tobillo... ーEkko miró hacia la criatura, dándose cuenta de quién se tratabaー ¿Es el consejal Heimerdinger?

La mirada del yordle entristecióー Ya sólo soy Heimerdinger.

ー ¿Qué hace de este lado del río? ーno era normal ver que alguien de la ciudad de arriba estuviera cerca de Zaun por voluntad propia.

ー Quise ofrecer mi ayuda a los ciudadanos del distrito, pero... Parece que soy... Indeseable.

Ekko rió sorprendiendo al yordle.

ー ¿Qué pasa?

ー Creo que tuvimos el mismo día. ーrespondió el moreno.

Heimerdinger miró de nuevo la pierna del jovenー Mm, eso me parece más serio, requiere atención médica.

ー Debo irme a casa, no estoy a salvo aquí. ーsoltó un quejidoー No sé cómo voy a llegar con la pierna así, y bueno... Ese era mi transporte.

Ekko sonrió ligeramente y recordó el rostro de su amiga. Antes de que el mascafuego explotara; el joven había pateado la bomba, fue por eso que se había torcido el tobillo. No iba a dejar que los últimos pedazos de quien fue su mejor amiga se extinguieran de esa forma. Tal vez había perdido la esperanza de que Powder regresara por completo, pero ese cuerpo alguna vez había sido el mismo que lo abrazó.

ー Puedo ayudarte a llegar a casa. ーmencionó su nuevo amigo.

ー No tengo como pagarle.

ー No es necesario, sólo dime tu nombre.

Ekko no sabía si dar su nombre así nomás, sin embargo se le hizo una buena oportunidad por si el pequeño pero inteligente yordle buscaba algún aprendiz. Era consciente sin duda de que a ambos les encantaba trabajar y crear dispositivos electrónicos, estando a favor del progreso siempre y cuando fuera seguro.

ー Soy Ekko.

ー Bien, Ekko, te llevaré a casa. ーHeimerdinger buscó entre la basura del lugar, encontrando unos palos con los que pudo fabricar un tipo de muleta para el moreno.

Ambos fueron en marcha hasta el refugio, que quedaba en un lugar apartado pero seguro, tomando en cuenta que todo Zaun era un lugar peligroso. En el camino se encontraron con Scar, uno de los mejores amigos de Ekko; tenía la apariencia de ser un murciélago.