Nota: Todo esto empezó por los hermosos hilos de los múltiples Mikey's que ví en Facebook. JAJDJA, es que, Dios, amé tanto eso.
En fin, se supone que esto es más comedia y romance, como los hilos, algo que no acostumbro a escribir, por eso, les pido paciencia.
(!) Tener en cuenta que Senju aquí será hombre. ¿Por qué? Porque si. (!) Alerta de spoilers.
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Takemichi Hangaki respiraba con dificultad, su día había sido completamente pesado, después de estar en clases y sentirse cansado, terminó ingresando como un nuevo miembro de Brahman, seguido de eso, apenas pudo descansar cuando Senju, el líder, lo obligó a ir a una cita en el parque de diversiones.
Realmente estuvo cómodo con el chico en la supuesta cita, era tan solo un joven de secundaria, unos años más joven que el.
Todo hubiese estado bien, pero una visión lo interrumpió y vió un futuro próximo desgarrador, donde Senju moría en sus brazos.
Desde ahí todo comenzó a poner nervioso a Takemichi, cuidando al más joven de cualquier cosa.
Solo se relajo un momento cuando Senju fue al baño, sin embargo, pronto al ver que demoraba se inquieto, listo para ir buscarlo, unos tipos vestidos de negro aparecieron frente a el con armas, tenían la intención de matarlo a el.
Takemichi había pensado que venían a matar a Senju, nunca imaginó que sería a el a quien quisieran matar, pero aún así, vió que la intención de Senju era protegerlo, pero no lo permitió, saltó sobre el más joven, cubriendolo con su cuerpo para evitar que este recibiera algún disparo.
La noche era fría y la lluvia estaba cayendo a cántaros, pero una fuerte voz resonó en el lugar, la rasposa voz de Draken retumbó.
Takemichi se levantó y aliviado le agradeció, pero pronto se asustó al ver como uno de los brazos de Draken había sido alcanzado por una bala que se disparó.
Mientras Senju iba por ayuda, Takemichi ayudó a Draken a ir a la zona de mesas, para refugiarse de la lluvia.
— ¡No debiste hacer eso, Draken-kun! Pudiste haber terminado peor...
— Tu tampoco debiste cubrir a Senju, Takemitchy
Bueno, el trenzado tenía razón, pero Takemichi no dejaba de sentirse mal por la sangre que escapaba del brazo del mayor, sus ojos picaron y pronto empezó a llorar impotente de tan solo imaginar que tan mal había terminado todo si hubiesen disparado más veces.
— Sabes Takemichi, eres un gran chico, siempre sonríes ante los problemas y te levantas sobre todo mal como un héroe
Comentó Draken mientras se hundía más en la silla donde estaba sentado esperando la ayuda que Senju traería.
Takemichi se sintió incómodo con esas palabras, por algún motivo sentía que todo estaba mal.
