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/Izi/

La puerta de mi habitación se abre y Jean entra.

*¿Q..qué pasa?-pregunto asustada.

*¿Qué pasa?-suelta molesto-nos toca ayudar a Sasha en la cocina-suspiro y caigo sobre la cama soltando una queja.

*¿Otra vez?-él tira del cubrecama para destaparme-tengo sueño, acabo de dormir un par de horas.

*Cuéntame en el camino pero levántate-me pone sobre su hombro y me lleva al baño-tienes 5 minutos.

Me baño a regañadientes y me visto de la misma forma. Todo es por culpa de Connie y su escapada con Hange, si no fuera por él yo no estaría tan cansada...pero si no fuera por eso mismo, no podría haber compartido tanto con Levi, jamás creí que podría hablar tanto con él.

*¿Lista?-pregunta y yo suspiro, salgo del baño.

*Eres una real molestia en este instante-digo y me subo a su espalda, él suelta una risa-¿cuándo va a terminar Connie con Hange?-pregunto bostezando.

*No lo sé-dice serio-hoy tampoco pudimos hablar con él pero Hange nos avisó que estaría fuera de nuevo.

*¿Estará todo bien?-pregunto preocupada y él hace una mueca.

*Eso espero pero es difícil saberlo, en estos tiempos todo parece salir mal-dice algo triste.

Casi todo.

Pienso muy rápido y me golpe mentalmente por eso.

Los recuerdos de la noche de ayer vuelven a mi cabeza y no puedo evitar sonreír. Se sintió extrañamente bien hablar con él, además de cómodo porque él no intentaba presionarme para obtener información y de todas formas no le conviene porque eso significa que puedo preguntar sobre lo que quiera.

-¿Y bien?-pregunta irritado-¿qué quieres saber?

Muchas cosas pero no quiero ser tan invasiva e incomodarlo así que intento hacer todas las preguntas personales a un lado y centrarme en las superficiales.

-¿Por qué está tan "obsesionado" con la limpieza?-pregunto simplemente-intenté no hacer las más personales-digo al ver que los músculos de su cara se tensaron, chasquea la lengua.

-Crecí en lugares bastantes sucios-dice serio, lo miro expectante-eso es todo.

-¿Qué?-pregunto sorprendida-no es justo-él sonríe de lado.

-Te recuerdo que hiciste lo mismo con tu historia, mocosa-dice divertido y aunque me toma de sorpresa verlo así pongo a un lado eso para no incomodarlo-me contabas cosas y las finalizabas a medias.

-Yo pensaba ser considerada con usted, capitán pero veo que no tiene ninguna recompensa serlo-él suelta una leve risa y no puedo evitar que mi corazón se detenga y quedarme viéndolo como idiota.

-¿Ahora vas a ser considerada? después de que desobedeces las ordenes y respondes...-cuando me mira se sonroja y vuelve a su expresión seria ocultando su cara en la dirección contraria-¿por qué me miras así?-niego intentando despertar.

-Lo siento-digo avergonzada y también corro la mirada-sólo quería saber un poco más.

-Quizás con tu otra pregunta-dice serio.

En ese momento y por lo avergonzado que estábamos decidí no preguntar algo que podría empeorar la situación así que cambié de tema y comencé a hablar sobre que su vida como soldado debía muy aburrida si nunca respondió o desobedeció una orden, y aunque se molestó por eso, el ambiente agradable volvió muy rápido.

Estrellas de medianoche (Levi Ackerman)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora