Tales of Herding Gods [ 2 ]

Capítulo 373:

"¿Será que este lugar será invadido por la oscuridad? ¿Por qué más debemos irnos antes de que el cielo se oscurezca? Preguntó Mu Qingdai.

Qin Mu negó con la cabeza, pero no explicó en detalle.

Todos estaban esperando fuera del salón divino cuando el cielo de repente se oscureció y se oyeron débilmente truenos. Qin Mu levantó la cabeza para mirar y el cielo que aún estaba despejado hace un momento. Para entonces, estaba cubierto de nubes oscuras densamente pobladas.

Era temporada de invierno y el clima era frío, por lo que rara vez habría truenos y mucho menos relámpagos. Sin embargo, había nubes oscuras y truenos sobre sus cabezas.

Las nubes oscuras se volvieron cada vez más espesas, cubriendo lentamente todo el cielo. Entonces comenzó una fuerte ducha, y todos se apresuraron a esconderse bajo el techo del salón divino para evitar el agua de lluvia helada.

La lluvia no debería haber sido tan fuerte en la temporada de invierno, sin embargo, caía con fuerza sobre ellos.

La docena de dragones de inundación también se apretujó bajo el techo y se enroscó alrededor de los pilares de bronce para evitar la fuerte lluvia. El dragón qilin estaba tomando una siesta en la entrada, ya que podía evitar la lluvia allí.

El ciervo se acercó al lado del dragón qilin y bajó la cabeza. Con sus cuernos, arrojó al dragón qilin fuera del salón y tomó su lugar.

El dragón qilin estaba furioso cuando quedó empapado por la lluvia. Regresó con la boca abierta de par en par, y el macho saltó y agitó sus enormes cuernos, preparándose para luchar en cualquier momento.

El vapor de agua humeante se elevó repentinamente del suelo, y Long Yu estiró las manos y tomó un puñado de agua de lluvia. "¡El agua está caliente!" dijo asombrado.

El corazón de Qin Mu se agitó ligeramente y también estiró las manos. La lluvia que caía del cielo estaba realmente caliente. ¡Era tan hirviendo como agua hirviendo!

Inmediatamente salió del salón divino y su vital estalló para dividir el agua de lluvia a los lados para que no aterrizara en su cuerpo.

Levantó la cabeza para mirar y vio que el cielo se había vuelto muy oscuro. En la oscuridad de arriba, había relámpagos moviéndose a través de las nubes oscuras de vez en cuando, y los retumbos de los truenos se podían escuchar a miles de kilómetros de distancia. Rodaba por encima de ellos a una velocidad extremadamente rápida antes de alejarse. ¡En una fracción de segundo, el trueno se había adelantado dos mil millas!

¡No sonó como un trueno que podría ser producido por un rayo!

Wang Muran y el resto también salieron del salón divino y levantaron la cabeza para mirar. Vieron más y más relámpagos, y cuando los rayos se cruzaron mientras atravesaban las nubes negras, fue muy aterrador.

La lluvia que caía del cielo se volvió cada vez más caliente.

"Parece que algo está sucediendo en el cielo ... Fatty Dragon, ¡baja ese dólar!"

Qin Mu se volvió y gritó. El dragón qilin soltó el agarre de sus mandíbulas y soltó el cuello del ciervo. El ciervo estaba furioso y quería atacar, pero fue aplastado por el dragón qilin sentado encima de él, que se sentía como una montaña inamovible en lugar de una criatura viviente.

El trueno en el cielo se hizo cada vez más frecuente, como si un gigante golpeara un tambor de guerra. Mientras tanto, los relámpagos se transformaron en bolas que rodaban iluminando la oscuridad.

Capas de cielos se abrieron en los ojos de Qin Mu mientras miraba las nubes. De repente, pudo ver vagamente figuras parpadeando en el cielo. ¡Esas figuras saltaron a través de las nubes y lucharon entre sí!