Mi Mala Elección 🥀

IV

Una tarde alegre y super divertida de picnic.

Así describía el momento nuesto querido pelirrojo, quien se encontraba sentado en medio de ambos pilares, compartiendo las frutas que había traido. —Tomioka-San ¿Qué fruta le gusta más? — Pregunta con curiosidad mientras se mete a la boca un par de uvas.

—La ciruela.

—Oh... ¿Y por qué?

—Bueno... Simplemente me gusta.

—Ya veo, —Sonríe y voltea su mirada al otro pilar. —¿y a usted Rengoku-San?

—¡La piña!

Giyuu se cubrió la boca para no reir tan fuerte.

—¿Qué pasa Tomioka? ¿Dije algo gracioso?

—No nada. —Dice volviendo a poner su expresión seria. ¿Qué acaso Rengoku era muy inocente o estaba actuando? —Tanjiro, ¿y a ti que te gusta?

—El durazno.

—Que interesante, ¿y porq-

—¡Kamado mi chico ten esto, ésta delicioso! —Interrumpe alegremente el oji dorado mientras dirige un trozo de fruta a la boca del menor. —¡Di aaa! —Pide cómo si le estuviera dando de comer a un niño pequeño y Kamado abre su boca siguiendole el juego.

Tomioka ya estaba muy fastidiado de las cosas que estaban haciendo ambos, así que algo triste volteó su mirada para comer algunas uvas que tenía en sus manos, reteniendo las ganas de mostrarse lo mal que se sentía. —¡Tomioka-San! Ahora le toca a usted. —Escucha el llamdo del menor y voltea su mirada con cierto brillo en sus ojos. Tanjiro estaba pidendole que abra la boca y estaba dirigiendo un trozo de fresa a él. Emocionado y mirando a Rengoku para sacarle cachita abre la boca y recibe la fruta. —¡Se ve muy bonito Tomioka-San!

—Lo sé...

—¿Y yo qué? — Pregunta Rengoku con mal humor.

—Usted también lo es, ambos son hermosos, vengan aquí. —Dice alegremente y rodea ambos brazos en cada cuello de los pilares para atraerlos a él y empezar a reir. —¡Seríamos una hermosa familia!

No, para él no había favoritismo.

Giyuu y Kyojuro se observan mientras el menor sigue riendo, y vuelven a darse una mirada asesina.

«Él es mío»

Casi cómo si estuvieran gritando ello.

—No quiero que se lleven mal, yo los quiero mucho a ambos. —Suelta dirigiendo su mirada al peli negro —Tomioka-San, no deje de sonreir, se ve muy bonito cuándo lo hace, así que le pido que haga eso de aquí en adelante ¿Bien?

—Lo haré por ti.

Kyojuro frunce el ceño.

—¡Que bien! — Grita alegre y deja de abrazar a ambos, para tomar el cuerpo de Giyuu con ambos brazos y acurrucarlo en su pecho.

Kyojuro gruñe molesto.

—Y Rengoku-San, la verdad me gusta todo de usted, pero sería perfecto si pudiera llevarse bien con Tomioka-San. —Dice acariciando los cabellos del pilar que tenía en sus brazos.

—Si me das un abrazo quizá lo haga... —Dice dirigiendo su mirada a otro lado y hace un leve puchero mostrando la molestia que sentía.

Tanjiro rie nuevamente por su actitud, deja de acariciar a Tomioka y se levanta para dejar un suave beso en la mejilla de Rengoku, haciendo que éste tornara sus mejillas de un leve color rosa. —¿Ahora sí se llevará bien con Tomioka-San?