Capítulo 19

312 32 9
                                    

Desperté mareada, me di cuenta de que estaba en un auto en movimiento.
-¿Peter?-la voz se me quebró de la emoción al verlo, él me hizo una caricia en la cara.
-Descansá La, estoy llevándote a la guardia, ya encargué algo para comer más tarde-él me miró apenado.
No entendía nada de lo que estaba pasándome.
-¿Cómo? ¿Como me encontraste? ¿Cuanto tiempo estuve en ese lugar horrible?-mis ojos se me llenaron de lágrimas.
-No pienses en cosas feas, trata de relajarte-él besó mi frente, sintiéndome mal lo abracé, vi que quién estaba adelante manejando era Nicolás.
Al llegar a la guardia Peter pidió que me hicieran muchos estudios, por suerte todo estaba bien, a pesar de todo el estrés que había pasado.
Nicolás nos alcanzó hasta la puerta del departamento de Peter.
-Cualquier cosa me llaman, ¿ok? Me da mucha vergüenza el haber confiado en una persona que nos traicionó..-él también estaba decaído.
-No lo sabías-Peter asintió con la cabeza- simplemente no lo sabías..
-Hay que ver que va a pasar con vos Lali-Nicolás me miró- podes ir presa..
Genial.
-¿Podes no hablarle de eso ahora?-Peter se lo pidió a Nicolás que suspiró, terminó asintiendo.
-Estamos en comunicación-nos saludó con la mano.
Subimos por el ascensor en silencio, Peter recalentó lo que había pedido, pollo con arroz, comí porque necesitaba hacerlo, después de hacerlo me senté en mismo sillón que él, a su lado, besó con dulzura varias veces mi frente.
-¿Te sentís un poquito mejor?-él me miró a los ojos esperanzado, asentí para hacerlo sentir mejor, aunque la realidad era que no, necesitaba tiempo para digerir todo lo que había pasado-ey, podes contarme todo.. Sé que estuvo.. Estuvo sacándote fotos y todo eso..
-Quiero no hablar de eso, por ahora-solté un suspiro, me escondí debajo de su cuello, Peter no me soltó, nos quedamos así un tiempo largo, después fuimos a la cama-Pit.. Perdón por haberte metido en toda mi mierda
-Lali.. Vos no me pidas perdón, yo quiero pedirte perdón por no haber podido llegar antes..-sus ojitos se pusieron brillosos.
-Tampoco es tu culpa... Estoy más aliviada de estar acá con vos-besé una de sus mejillas, él esbozó una pequeña sonrisa.
Caminamos hasta la cama y nos metimos juntos, besé los labios de Peter disfrutando de eso, también le hice una caricia en la cara.
-¿Sabes? Estas situaciones de mierda hacen que pienses mucho, en cosas malas, en momentos buenos.. Lindos.. Recordé cuando éramos novios en aquellas épocas-elevé mis cejas y él se rió- más jovencitos, locos de amor.. Y la realidad es que nunca pude olvidarte Pit-le sonreí- yo.. Te amo..
Me puse emocional, él se alegró, llenó mi cara de besos.
-Yo también te amo mi chiquita... Y tampoco te olvidé, intenté rehacer mi vida, pero ambos teníamos una historia pendiente, una que nunca se tuvo que haber terminado, pero acá estamos, en este momentito juntos-elevó sus cejas y asintió con la cabeza- y confío en que los astros se van a alinear a nuestro favor
Le acaricié uno de sus brazos y solté un suspiro, cerré mis ojos para descansar desde mi lugar más seguro, si bien había pasado mucho tiempo dormida no descansé, me habían drogado para eso.

Cuando abrí mis ojos me encontré con los verdes de Peter, estaba mirándome.
-¿Hace cuanto te despertaste?
-Hace un tiempo largo.. No pude dormir bien, tengo malo de que otra cosa te pase..-su voz se quebró.
Solté un suspiro.
-¡Ey! Estoy acá otra vez, de nuevo..-besé su mejilla- y por el momento bien, así que dejá de pensar cosas malas, planeo hacer lo mismo.. Por lo menos intentarlo
Él asintió con la cabeza.
-Voy a tratar de hacer lo mismo... Es que quiero que ya no te pase nada malo-me miró apenado.
-Shhh..-lo besé porque lo necesitaba, lo había necesitado- disfrutemos del hoy.. Todo esto me hizo pensar mucho en eso.. Hay que vivir el hoy
Peter besó mi frente.
-Tenes razón en eso-esbozó una pequeña sonrisa- hoy tengo mi día libre para cuidarte y mimarte, mañana tengo que volver a la empresa.. Y tengo que hablar con el Señor Francella, se enteró de que estuvieron pasando un par de cosas
-¿Qué sabe de todo esto?-elevé mis cejas, me agarró curiosidad.
-Qué la persona atrás de tu laburo era Ricardo.. Que de su gente te secuestraron.. No sabe lo de nuestro bebé..-hizo una pausa- voy a mencionárselo para que declare a favor tuyo, para que no pises una cárcel, no lo mereces Lali, ¿actuaste mal? Actuaste mal, pero en un principio, después fuiste rehén de toda esa mierda..
-¿Crees que sí puedo ir presa?-lo miré fijamente a los ojos, él suspiro.
-Hay mucha documentación que te incrimina, no solo en este caso, en otros más.. Llamé a una amiga mía, abogada, Emilia, ella va a defenderte-Peter me hizo una caricia en la cara- todo va a salir bien
Él no paró de repetirme que todo iba a estar bien, aunque eso no era algo cien por ciento garantizado.
Por la tarde salí a dar una vuelta junto a Peter, caminamos por una plaza, una persona de la policía no me perdió de vista, me sentía incómoda, pero era lógico nadie confiaba en mi.
Algo desanimada volví a la cama, Peter me llenó de besos mi cara para que cambie mi humor.
-¡Ey! ¡Quiero a mi mujer la que nunca nunca se rinde!-elevó sus cejas.
-¿Tu mujer?-reparé en eso, logró que me riera.
-¿No que siempre fuiste mi mujer?-me miró coqueteando conmigo.
-Fui tu novia, mujer es algo más fuerte.. Mujer se le dice a la persona con la que te casas..
-¿Me estás tirando una indirecta para que te proponga casamiento?
-¡Tarado!-no pude evitar reírme fuerte, Peter me hizo cosquillas como cuando éramos novios, el tiempo pasaba, en el pasado solíamos vivir en una burbuja de felicidad, tan solo por un momento sentí lo mismo que antes, que era feliz, atrás de tanta mierda seguía siendo la misma Lali de siempre, él nunca dejó de creer en mi, siempre lo supo, que yo seguía siendo yo.
Vimos una película, Peter me había preparado pochoclos dulces, mis favoritos, me vino bien para distraerme, despejar la mente.

PETER

Llegué a la empresa y antes de pasar a la oficina de Guillermo Francella me puse nervioso, tenía muchas cosas que decir, el futuro de Lali dependía de mi.
Toqué la puerta y entré, mi jefe me miró sin expresión alguna.
-Hola-lo saludé.
-Ya sé a que venís, a explicarme mejor todo lo que pasó, lo que esta pasando..-él soltó un suspiro- mi empresa siempre fue una perfil bajo, nunca estuvo en el ojo público, hasta que llegó Marianita.. ¿Ella tiene que ver en todo esto, no?
Asentí con la cabeza, no pude negárselo, tenía que ser transparente para que me crea.
-Ella se equivocó mucho, siguió adelante con su "plan" porque su jefe la tenía amenazada, sé que te enteraste de que la secuestraron, ella ya pagó lo suficiente por todo lo que hizo... Necesito que por favor declares a favor de ella... Lali..-hice una pausa-Lali está esperando un bebé..
-Y es tuyo, ¿no? Sino no estarías acá..-soltó un suspiro.
-Estaría acá igual si el bebé fuera de otro, yo a ella la quiero... Siempre la quise.. Nosotros nos conocimos hace mucho tiempo atrás, fue mi primera novia-sonreí inevitablemente, siempre que pensaba en nuestro pasado y como nos conocimos por primera vez me emocionaba- en este tiempo yo hice todo lo que pude para que tome el camino correcto, pero la estaban obligando a hacer algo que no quiere, ahora acá tiene amigos, compañeros de trabajo que quiere mucho, no quiere hacerlos perder el trabajo, no quiere nada de eso..
Guillermo se me quedó mirando con seriedad.
-¿Puedo hablar con ella? A solas... Necesito que la llames, ¿podes hacerlo?
No entendí que tenía que hablar con ella que no podía hablar conmigo.
Terminé asintiendo con la cabeza.
-Mejor voy a buscarla..-saludé a Guillermo con la mano y fui hasta mi departamento.
-¿Qué haces por acá?-se sorprendió al verme.
-Necesito que vengas conmigo-le hice señas para que me siguiera, ambos nos subimos a mi auto, manejé hasta llegar a la empresa.
La vi entrar a la oficina y la puerta se cerró.

LALI

Guillermo Francella se quedó mirándome, evaluándome, no entendí porque.
-Peter me puso al día.. ¿Tu bebé está bien?
Nerviosa asentí con la cabeza.
-No sufrió nada por suerte..
-¿Sabes porque Ricardo te eligió a vos para el trabajo de fundir mi empresa?
Negué, no sabía a que quería ir con esto.
-Sos Mariana Espósito, pero en el pasado no.. Vos.. Mi mujer tuvo a una nena muy linda, nuestra nena.. Pero ambos no estábamos bien económicamente, así que lo mejor fue dejarte ir..
¿Qué?
-A lo que voy.. Ricardo sabía que vos eras mi hija biológica, yo sabía que estabas metida en algo raro, desde el primer momento me di cuenta, creí que ibas a confesarlo, me decepcioné, pero cuando me enteré la verdad.. Perdón Mariana, esto en parte es mi culpa-sus ojos se llenaron de lágrimas.
-Vos.. No...-se me quebró la voz- yo sabía que era adoptada, no me lo ocultaron, pero mis papás no me contaron la otra cara de la moneda-solté un suspiro, internamente estaba algo alterada, pero estaba tratando de mantener la calma.
-No te abandonamos... Tu mamá Sabrina murió un tiempo después de eso, y ese fue el momento en el que hice todo lo posible para convertirme en una persona "importante" para así tal vez poder conocerte en un futuro..-Guillermo seguía emocionado, extendió sus brazos y me agarró de las manos.
-Yo.. Necesito procesar toda esta información..-se me cayeron algunas lágrimas de mis ojos- no quiero llorar, pero mis hormonas..-me reí nerviosa.
Guillermo se acercó y me abrazó cálidamente, me sentí rara, jamás hubiese pensado este desenlace.
-Tranquila... Hay tiempo.. No quiero que te asustes con todo esto..
-Está bien, pienso pensar y.. Después hablamos
Él asintió con la cabeza, salí de la oficina y lo noté a Peter desesperado, se sorprendió al verme con las mejillas mojadas.
-¿No va a declarar a tu favor?
-Yo creo que sí.. Pero.. Ahora necesito tomar algo de aire
Bajé por el ascensor, Peter quería que hablara, que le responda que estaba pasando por mi cabeza, pero lo que había pasado antes me había shockeado.

LadronaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora