Capítulo 1: Lo que cuentan, no es todo el rompecabezas

29 1 0
                                    

Me llamo Alyssa Whisker, tengo diecinueve años, acabo de terminar con mis exámenes de ingreso para la Real Academia de la Armada, había sido mi sueño desde que tengo cinco años, luego de ver a mi padre en una de las marchas reales.

Entrené para ello desde entonces, cada minuto, cada segundo que tenía, lo utilizaba para perfeccionar mi magia o en algún deporte para mantener mi estado físico, me preparé para el futuro que me esperaba, a partir de el primer año de educación media alta, se nos permite elegir clases, tomando en cuenta lo que decidas hacer luego de acabar la escuela, ya se imaginaran que elegí, mucho deporte, Historia, Leyes

Volviendo a la historia, ese día estaba con mi padre, miraba las enormes puertas del frente de la Academia, cabe decir que estaba eufórica y, y emocionada, aunque no lo mostraba, se escuchaba como hacía ruido con mi pie en el suelo y mi sonrisa no desaparecía.

-Quieres saltar hasta el techo ¿no es así? - pregunta mi padre sonriendo y arqueando la ceja mientras me miraba.

-Cl-Claro que no papá ¿Qué dices? -dije mirándolo roja hasta mis orejas, estaba avergonzada y sorprendida, por su comentario.

-Aja y yo no te crie durante diecinueve años ¿verdad? - suelta una carcajada acomodándose el cabello- Estamos solos puedes hacerlo ahora, aprovecha –lo miré y sonrió dando pequeños saltos y soltaba risitas de emoción- Estoy en la Academia, estoy en la Academia –repetía sin parar, para luego parar y ponerme derecha y quedarme en silencio tratando de actuar normal al ver a uno de generales-.

-Buenos días, soy Phil Dawn, Segundo General de la Armada Real, Cadete Whisker y ella debe ser su hija y nuestra nueva integrante ¿verdad? -.

Con respeto me incline un poco en modo de saludo y luego extendí mi mano- Es un placer General Dawn y estoy feliz de poder trabajar con usted en el futuro- el estrecho mi mano y sonrió, mi padre me miraba con orgullo- Bien, síganme los llevare con el General Chi, quien nos está esperando-.

El General Junseo Chi es el General en Jefe de la Armada y Director de la Real Academia, es decir que él es el que toma las decisiones definitivas en cuanto a la protección de la familia real. Yo miraba a mi alrededor como pasaban algunos de los alumnos y soldados a mi lado, los cuales mire de reojo mientras nos adentrábamos a los pasillos los cuales estaban llenos delos cuadros de los reyes y las reinas que existieron hasta el momento, la familia real está compuesta por los seres mágicos más poderosos los cuales eran los fénix, ellos son inmortales pero llegan a una edad en la que ceden su puesto a sus hijos o hijas, hay varias ramas en las familias pero es una larga historia ja, ja, ja. El último cuadro mostraba a los reyes actuales, el Rey Adrion y la Reina Freya con una o un bebé, mire la pintura extrañada y mire al General Dawn y luego le pregunte;

-Señor ¿Quién es él bebé que está cargando el Rey Adrion? - el General mira a mi padre e intercambian una mirada seria, para que luego ambos asientan, mi padre se acerca a mí y rodea mis hombros para luego responderme

- Ella es la princesa, heredera al trono Fayna- abrí mis ojos en sorpresa ante su respuesta y balbuceé- ¿P-Princesa? Pero jamás la había visto- El General suspiro y rasco su nuca- La princesa fue secuestrada hace casi dieciocho años, solo el personal del palacio y La Armada saben de esto y fue por órdenes de los reyes que no sea hablado fuera de los muros del palacio y la Academia Real y es por eso que te pediré por favor que no hables de esto con nadie -

Vi que me miraban con seriedad y asentí, dándoles a entender que mu boca era una tumba- Pero ¿se sabe quién fue el responsable o los responsables, del secuestro? ¿Al menos se sabe si la princesa, está viva? -.

- No tenemos casi nada de información, no se ha encontrado ningún cuerpo. No hay rastro de alguien con un aspecto físico similar al de ella ni en Iri ni en Geo, se sigue investigando, aunque se hagan especulaciones sobre la apariencia de la princesa en estos años, nadie puede saber cómo se ve en realidad, tampoco se le puede hablar a cada chica pelirroja de ojos ámbar o castaños, primero se gastan recursos de más y es una perdida tiempo –

La llama perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora