Consecuencias de ser feliz(en curso)

Prólogo

"Solo quería ser algo en la vida de alguien, quería enamorarme, quería sentirme valorado,  querido, en pocas palabras, quería sentirme especial para alguien"

Blake un joven de 16 años, su abuela murió cuando el solo tenía 14 años, desde aquel día fue diagnosticado con un trastorno generalizado del desarrollo no especificado y ansiedad.

Es una especie de enfermedad que afecta al no poder socializar correctamente con las personas, ya sea dificultando el desenvolvimiento verbal con otros o carecer de la habilidad de hacer interactuar fácilmente con la gente. No era un genio, ni un estúpido. Su cerebro era el de un niño completamente normal. La persona más apegada a él era su abuela, ya que desde que nació fue la persona que hizo el papel de madre, ella lo educó, lo enseño, e hizo que se sintiera el niño más especial del universo. Sus padres apenas le acompañaron en su vida, estaban separados, cuando Ana, la madre de Blake, se enteró que estaba embarazada de él, se lo dijo a su marido, Harris, su única reacción fue pegarle un golpe en la cara y se fue huyendo, Ana aguantó sus 9 meses de embarazo y cuando dio a luz se lo dejó a su madre, la abuela de Blake. Le dijo que cuidara bien de él que iría a por unas cosas en la tienda del pueblo, nunca volvió para cuidar de su hijo.

Vivían en New york, una gran ciudad de estados unidos, estaba feliz allí , con sus amigos y sus estudios le iban genial, simplemente el sitio donde siempre quiso estar, no quería irse de allí nunca, lo tenía claro.

Ana se vio sola, su marido la abandonó y básicamente tenía que criar a un niño que no estaba en sus planes. Ninguno de la familia saben donde fue su madre.

Desde que falleció su abuela, se fue a vivir con su padre, en Stowe es un pueblo ubicado en el condado de Lamoille en el estado estadounidense de Vermont. Es un pueblo pequeño, nunca pasaban acontecimientos importantes, un pueblo aburrido, donde la mayor parte de la población estaban en sus casas, los niños pequeños se encontraban en los parques jugando a el escondite, peonzas, canicas, o algo de esos tipos de juegos.

Blake progresó mucho con su trastorno, pero se lo tenía muy callado, de hecho lo era, era un chico silencioso, solo hablaba cuando quería y con quien quería.

Era un chico que le costaba socializar desde que perdió a sus amigos de toda la vida, los cuales juraron estar en contacto siempre, ni una sola llamada recibió.

Tenía en pelo negro, era flacucho, su mirada era una galaxia ,sus ojos hallaban un color verdoso, muy verde, porque por mucho dolor que haya podido pasar, el brillo de sus ojos jamás desapareció. Sonreía muy poco, pero las veces que lo hacía su sonrisa contenía mas de mil poemas escritos en una hoja de papel, su sonrisa era única, era preciosa, privilegiados aquellos que pudieron verle sonreir.